Hoy es el cumpleaños de mi primo Oscar. Le he mencionado unas cuantas veces en este cochambroso blog y las que quedan. Desde nuestra más tierna infancia nos une nuestra férrea pasión por la música, el cine y lecturas varias. Conectamos a ese nivel y a otros muchos. Guardo los mejores recuerdos de juventud a su lado, por tierras castellanas. Los veranos en Portillo y Arrabal de Portillo con mi primo y sus amigos los tengo grabados a fuego. Buenas risas, camaradería, desenfreno y mucho rock´n roll. Noches de esas que no quieres que terminen nunca y que no lo solían hacer porque a menudo se unían con el día siguiente ja ja.
Muchos años después seguimos igual en lo concerniente a nuestra irrenunciable interés por la música y derivados. Algo que me encanta de mi primo es su capacidad para transmitir su pasión por la música, el cine o los libros con naturalidad sin darse aires y con un entusiasmo que compartimos. Sencillamente no concebimos la vida sin cultura aunque suene muy rimbombante. En los tiempos que salíamos de chufla podíamos estar horas y horas charlando sobre estos temas. Recuerdo escuchar con una resaca considerable más de una vez el mítico de 4 a 3 de Paco Pérez Brian en Radio 3. Buenos Tiempos.
En fin aquí seguimos irreductibles, inasequibles al desaliento, compartiendo información desde la distancia. Uno de los mejores regalos que me hizo mi primo hace un par de años fue Swamp Tales álbum de Gruff grupo en el que toca el bajo y hace coros. Llevo tiempo pensando en escribir una entrada sobre el álbum que escuché mucho cuando se editó hace un par de años y que recupero de vez en cuando por una sencilla razón es muy bueno. Tal vez avezado lector piense que mis lazos familiares me hacen ser subjetivo. Para empezar la objetividad no existe. Me meo en ella. Y para seguir aquí dejo unas cuantas reseñas realizadas con enjundia y más habilidad de la que me gasto yo en este cochambroso blog:
Poco puedo añadir a lo que se lee en estas tres reseñas. Comparto muchos de sus argumentos. Tan sólo escribir que me encanta que mi primo la goce en una banda capaz de editar un disco tan bueno como Swamp Tales, un álbum que puede que partiendo del hard rock se sumerja sin complejos y con naturalidad en otros estilos a priori más lejanos a sus anteriores trabajos. Esas gotas de blues que se incrustan en la inicial Haunted House son una bendición, Mother Road es una de mis canciones favoritas de los últimos años (os lo juro) y ahí ando intentando cantarla jaja, me chifla el riff contagioso y vacilón de Kiss My Ass, ese comienzo de The Holler me vuelve loco, la forma en que crece el tema con unos cuantos riffs abrasadores y ese final tan épico con el cambio tan molón que surge en el minuto 4:35, esos momentos punkarrillas de Ten Men o ese final tan peculiar e irresistible que es Soft Hands que me cuadra de lujo en esa posición, la última. Importante también escoger el orden de las canciones. No sé si en esto estuvieron todos de acuerdo. Indagaré al respecto ja ja.
Tan sólo recomendar encarecidamente su escucha. Sigue habiendo muy buena música por ahí, en este caso bien cerca, sólo hace faltan oídos para escucharla. Así que celebremos la música como todos los días y un saludo a los artistas Jaime Repesa (Guitarra, piano y coros), Oscar MG (Bajo y coros) Rober V.Monroy (guitarra, voz y coros) y Oscar Lázaro (Batería y percusión). Rock on!