jueves, 12 de noviembre de 2009

The Black Crowes. Before the frost...

Hace un par de fines de semana en la Fnac me informaron de que el vinilo Before the frost de los Black Crowes esta temporalmente fuera de circulación. Tengo pocas esperanzas de que llegue pero no me pude resistir y compré el cd. Aun así he mantenido el pedido por si acaso…

Y aquí estoy dándole cancha al disco estas ultimas dos semanas. Iniciando cada nuevo día con Good Morning Captain. Paladeándolo como se merece. Poco a poco, reservando buenos momentos para degustar las composiciones de los hermanos Robinson. La presentacion del cd es chula, mejor que la del Warpaint y se incluye un código para descargarse otro disco. De momento todavía no lo he hecho. Al no tener Internet algún colega me lo pasará…

Cuando se editó Warpaint escribí que parecía un disco grabado en alguna cabaña alejado del mundanal ruido. Bien pues como ya sabemos todos este no es que parezca grabado de esa forma sino que ha sido registrado en vivo en el rancho estudio del mítico batería de The Band, Levon Helm. Y el resultado es cuanto menos, excitante, evocador, alejado de lo que uno puede esperar de los Cuervos y a la vez con su sello reconocible. Estos chicos hace mucho tiempo que son una banda con estilo propio. Si, si con personalidad. Una personalidad basada en el acervo musical americano. Bebiendo de todas las fuentes recorren su propio itinerario. Deudor de los clásicos pero plagado, y esto es lo más importante, de exquisitas canciones. Es un viaje repleto de lugares comunes y paisajes exóticos. Todo cabe y lo hace sin estridencias, con naturalidad.

En el disco tan solo hay tres canciones que no me gustan, alguna nada como I ain´t hiding y no porque tenga algo en contra de ritmos mas funkys o bailables, de hecho soy la mas loca del lugar, sino porque el tema me parece monótono, con poco gancho y muy largo. Tampoco me convence And the band played in… que me resulta aburrida. La Faces total A train still makes a lonely sound no es tampoco de mis favoritas aunque de las tres es la que más me gusta. Eso si, como es habitual en ellos cierran con una joya The lost place that love lives. Y por el camino nos han regalado otras cuantas de esa altura o mayor.

Desconozco cuando se les acabará la inspiración, no cuánto les durará el buen rollo con Luther Dickinson y Adam MacDougall. Tal vez acaben enfurruñados y tomándose otro respiro de más de un lustro o tal vez están aquí para quedarse. Con los hermanos Robinson las vueltas están a la orden del día. Pero mientras siga grabando discos como este no me pienso perder ni uno de sus pasos.

Pongo aquí el enlace con varias opiniones que he leído estos en algunos de los blogs que caóticamente y desde la clandestinidad suelo frecuentar:

http://marcmonje.blogspot.com/2009/09/black-crowes-before-frost-2009.html

http://elsignodelostiempos.blogspot.com/2009/09/black-crowes-before-frostuntil-freeze.html

http://lumpen00.blogspot.com/2009/09/before-frostuntil-freeze-black-crowes.html