martes, 20 de noviembre de 2012

Lucinda Williams. Car Wheels on a gravel road


Algunos músicos son tan perfeccionistas, están tan sumergidos en los sonidos que escuchan en su cabeza que cada vez que entran en el estudio más que disfrutar sufren, padecen, se estresan… Quieren plasmar en el disco su obra tal y como la conciben y  acaban haciendo la vida muy difícil a los que les rodean. La convivencia en las cuatro paredes de turno se vuelve por momentos insoportable.

No se si hasta tales extremos pero muy cerca de ese grado de tensión estuvo Lucinda Williams cuando grabó su maravilloso Car Wheels On A Gravel Road. Steve Earle que participó en el disco como coproductor, guitarrista y haciendo coros le espetó en un momento dado “Tranquila, es solo un disco”. Buddy Miller que también contribuyó lo suyo declaró en una entrevista que los créditos del disco están mal, que Lucinda en su afán por que todo estuviese perfecto se hizo un lío con los que participaron e incluso rompió artísticamente con uno de sus máximos colaboradores hasta el momento: Gurf Morlix.

En fin que la amiga Lucinda se pone algo más que nerviosa en el estudio. Poco importa cuando se tienen canciones tan buenas como las que figuran en este disco. La música fluye y se impone a todas las adversidades. Car Wheels On A Gravel Road superó toda la tensión y a día de hoy sigue siendo el mejor disco de Lucinda. Nunca ha vuelto a grabar algo tan perfecto. Además, mejor rodeada imposible: Roy Bittan, Jim Lauderdale, Buddy Miller, Steve Earle, Charlie Sexton…. Es uno de esos casos en los que todas las canciones encajan y parecen estar situadas en el orden correcto. Todas me gustan pero uno siempre tiene sus favoritas: