Durante una década Andrés Montes y Antoni Daimiel formaron
un peculiar dueto televisivo. Fueron los encargados de narrar los partidos de
la NBA en el Canal Plus en aquellas míticas madrugadas de los viernes. Muchos
de los que seguimos aquella liga trasnochamos con las retransmisiones de estos
dos tipos que crearon un estilo propio y revolucionaron la forma de hacer
periodismo. Se acoplaron perfectamente. Montes era un torbellino, un narrador
nada ortodoxo capaz de inventarse los motes más divertidos y rocambolescos para
los jugadores y Daimiel era un periodista meticuloso, analítico y reflexivo.
Muy distintos a la vez que complementarios. El humor prevalecía por encima de
todo. Y es comprensible dadas las circunstancias. O lo llevas con humor o a ver
qué se podía hacer frente a uno de esos partidos infumables que de vez en
cuando se dan en la regular season de la NBA.
Escribo esto porque he terminado de leer El sueño de mi
desvelo de Antoni Daimiel. Un divertido repaso a la trayectoria de este tipo
durante más de tres lustros contándonos lo que sucede en la mejor liga de
baloncesto del mundo. Daimiel ha tenido la fortuna de ver in situ parte del
reinado de Michael Jordan al que dedica un capítulo del libro, ha gozado con el
juego de uno de los mejores ala pivots de la historia, Tim Duncan y se lo pasó
en grande viendo a los Suns de D´Antoni o a los Kings de Adelman aunque estos equipos no ganaran
nada.
El libro se lee de un tirón. En una tarde te lo ventilas. No
creo que a Daimiel le haya costado mucho más escribirlo pero esto no es una
crítica todo lo contrario creo que el tipo va a lo concreto y lo hace con su
estilo habitual. A mi siempre me ha gustado como comentarista y por lo que le
he leído tanto en su blog como en este libro también me convence como escritor.
Mediaset acertó contratándole como comentarista del pasado Eurobasket pero ya podían haber hilado más fino con los demás…