Un invitado inesperado se ha colado en mi equipo de música. Backspacer de Pearl Jam. Desde que se editó no había escrito nada sobre él más que nada porque suelo juntar unas cuantas letras sobre lo que me gusta y suelo obviar lo que no lo hace. Prefiero centrarme en cosas positivas. Hasta ahora las veces que había escuchado Backspacer había pasado totalmente desapercibido para mis sentidos. Apenas un par de temas me gustaban. Pero la cosa ha cambiado lo suficiente como para que le dedique unas líneas.
Tras el concierto de Pearl Jam en el BBK Live cuatro o cinco temas de su último disco rondan por mi cabeza. Curioso. En su día le di bastante cancha al disco pero tras sucesivas escuchas acabo arrinconado. Tan sólo el single The Fixer que me sigue pareciendo una elección perfecta y Just Breathe que parecía salida del reinvindicable Into the Wild de Eddie Vedder me gustaron al principio. El pasado viernes Unthought Known, Got Some, Amongst the waves me sonaron tan bien en directo que decide recuperar el álbum por si acaso.
Y aquí estoy, llevo unos cuantos días disfrutando con un álbum que había dado por desahuciado y que ahora me está proporcionando momentos placenteros. Me sonrío porque no me lo esperaba. Y me acuerdo de lo que me dijo mi primo Oscar, escúchalo sin prejuicios, que esta muy bien. Y mira por donde a estas alturas comparto su opinión. No se hasta cuando me durará esta pequeña fiebre pero de momento me limito a disfrutar, razón fundamental por la que escucho música.