Kerosene Hat fue el primer disco de Cracker que entró en mi casa. Pertenece a esa época en la que solía quedar con dos colegas de mi pueblo con los que intercambiaba material. Esos tiempos en los que grabábamos cds e incluso fotocopiábamos en color las portadas. Suena a Pleistoceno. Uno de estos amigos me dijo prueba con estos, creo que te van a gustar. Y lo hicieron. Especialmente me golpeó fuerte el que fue el single del disco, Low, la clase da canción que escuchaba en bucle y que grababa en los recopilatorios en cinta que solía hacer. Ahí nunca faltaba.
Este disco se publicó en 1993 en plena época grunge y aunque parezca mentira a Cracker se les relacionaba de alguna forma con aquellas bandas por singles como Low y tres años después especialmente por I hate my generation, tema que Perez Brian ponía una y otra vez en su programa de 4 a 3 de Radio 3. En cualquier caso fue algo efímero, cuestión de cinco minutos pero que coincidieron con el momento de máxima popularidad de la banda. Y es que Kerosene Hat casi llegó al platino en USA. Poca broma y su máximo esplendor comercial que poco a poco fueron perdiendo, no así el artístico.
Para muchos Kerosene Hat es su mejor disco. Para mí un día lo es al siguiente ese puesto lo ocupa otro, tal es el nivel de casi todos. Quizá Gentleman´s Blues sea imbatible. Aunque insisto cuando escuchas otro te dices este también. De lo que no cabe duda es de que este álbum está repleto de temazos, auténticos clásicos que la banda suele ejecutar en directo: Low, Get Off This, Sweet Potato o la celéberrima Euro Trash Girl, que figura como track oculto. Y si, todos esos singles están chulos aunque confesaré que si no tocan Euro Trash Girl en sus conciertos no voy a ser yo el que la pida. Pero hay mucho más.