Con apenas veinticuatro añitos Marcus King va por su cuarto disco. Este chico prodigio se inicio bajo el auspicio de Warren Haynes y sus dos primeros discos ahondaban el legado blues rock cercano a Allman Brothers con cierta querencia para desarrollar largas jams sobre todo en directo. El tipo es un prodigio a las seis cuerdas y llamó la atención de muchos músicos entre ellos de Chris Robinson que le reclutó para su gira As The Crow Flies con el sano objetivo de recaudar unos dólares explotando el cancionero cuervil ja ja. Hace un par de años dio un pequeño giro con su banda y publicó Carolina Confessions un álbum en el que ya se dejaba entrever que el soul ganaba mucho terreno con glorioso protagonismo para la sección de vientos. Un disco de largo recorrido que todavía hoy me enchufo con algarabía y devoción.
A principios de este año Marcus King dio otro pequeño viraje a su carrera al ponerse bajo los mandos de Dan Auerbach y supongo que eso le habrá dado un pequeño empujón comercial dada la fama del productor en cuestión. Y lo cierto es que el resultado es apabullante. Desconozco que mérito tendrá al célebre Auerbach en el asunto. Si su participación es meramente nominativa o si su contribución ha sido decisiva para que Marcus profundice en la senda iniciada en Carolina Confessions dándole todavía una vuelta de tuerca al asunto. Para que se centre en su sorprendente voz directamente emparentada con el mejor soul de los sesenta sin descuidar la guitarra por supuesto. Aquí lo verdaderamente electrizante es como canta Marcus. Las canciones están reducidas a lo esencial y la forma en que están interpretadas y producidas es todo un acierto. Sus dos primeros discos quedan muy lejos a pesar de ser de hace apenas un lustro. Y para bien. Que no se malinterprete esta afirmación. Es un halago. Disfruto con esos dos primeros discos pero los dos últimos me parecen mejores, todo brilla más: las canciones, la guitarra, su voz, el sonido, la producción.
El álbum se inicia con una espectacular Young Man´s Dream. Los primeros compases tan sólo con la guitarra acústica y la voz de Marcus. Unas primeras estrofas con la voz emocionante y rota voz de Marcus y poco a poco se le van a ir sumando una slide, el piano, la batería. Todo se configura con una clase de no te menees. Una canción sublime. Sin que musicalmente sea muy similar pero me recuerda al espíritu que capturó Mike Farris en su soberbio Goodnight Sun. El siguiente The Well es más reconocible deudor del blues rock más básico pero cuenta con un efectivo y estimulante riff que se te queda a la primera y un desarrollo soberbio. Apenas tres minutos de canción que podrían ser un single triunfador.
Wildflowers & Vine es un fino número de soul que se beneficia de unos maravillosos coros nada estridentes que mecen la voz de Marcus de forma elegante. Los teclados y el piano son fundamentales sosteniendo el tema brillantemente y el sólo que se casca hacia el final Marcus es simplemente perfecto. Nada de pirotecnia barata. Insertado de forma magnifica e impulsando el torrente de voz final, ese bonito duelo de llamada respuesta entre Marcus y las coristas. En definitiva tres pedazo de temas para abrir. Mejor imposible.
Firmado por primera vez en solitario sin sus compinches habituales esta vez Marcus King ha estado acompañado de Bobby Wood a los teclados, Gene Chrisman a la batería y Dave Roe al bajo. Y con ellos y bajo la batuta de Auerbach se ha centrado en potenciar su voz, en darle cancha al soul en detrimento del blues rock apostando fuerte por temas de apenas cuatro minutos que se adentran en terrenos hasta ahora no explorados como esa curiosa Sweet Mariona y Break que perfectamente podrían figurar en el disco de Yola, Turn It Up o One Day She´s Here con vocación incluso bailable, sin olvidarse de algún que otro trallazo blues rock como la mencionada The Well o la furiosa Say You Will. Desconozco si Marcus seguirá esta senda o volverá con su banda a derroteros más blues rock o incluso si mezclará sin complejos todo en un disco a poder ser doble ja ja. Haga lo que haga le voy a seguir la pista fijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario