miércoles, 30 de septiembre de 2009

Mark Olson & Gary Louris. Ready For The Flood

He aprovechado el pasado fin de semana para darle más cancha a algunos discos que no he podido disfrutar en la locura diaria que nos invade. La música es para disfrutarla y escoger el momento adecuado para la escucha del disco en cuestión se torna vital por lo menos para mis sentidos. Y la elección del momento y el álbum ha sido la adecuada. Mientras Unax duerme la siesta, últimamente de casi dos horas y media, he puesto en el reproductor una y otra vez, Ready For The Flood el disco de Mark Olson y Gary Louris.

Y me he deleitado con el reencuentro de dos amigos que han firmado juntos dos discos fundamentales en mi vida Hollywood Town Hall y Tomorrow The Green Grass y a los que afortunadamente las musas lejos de abandonar les rondan todavía con envidiable salud. Basta escuchar The Rose Society, Bicycle y Turn Your Pretty Name Around la trilogía inicial de este Ready For The Flood para regocijarse con esta nueva aventura sonora. Hay tenemos al menos tres temas soberbios donde las melodías vocales de estos dos tipos vuelven a brillar como lo hacían en aquellos maravillosos discos.

Chris Robinson, amigo desde hace veinte años de Louris y Olson se encarga de la producción y deja que la música fluya, que las buenas vibraciones se apoderen del oyente en magnificas canciones como Doves And Stones o esa maravillosa My Gospel Song For You. Ha escogido con pleno acierto la atmósfera que un disco de este tipo necesita y tan solo falta un oyente dispuesto a dejarse atrapar en este sencillo y envolvente entramado sonoro. Algunos de estos temas me recuerdan a esas gemas acústicas del After The Gold Rush del maestro Young. Así pues, que suene bien alto de nuevo, Ready For The Flood.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Rhapsody in Blue in Manhattan



Esta mañana estaba haciendo un zapping radiofonico cuando he cazado a un locutora que ha anunciado Rhapsody in Blue. Asi, enterita esta monumental pieza de George Gershwin, posiblemente junto a Duke Ellington el mayor compositor de ese pais lleno de contrastes llamado Estados Unidos.

Me imagino que como tantos otros descubri Rhapsody in Blue en la película Manhattan de Woody Allen. Este la utiliza en la escena que abre la película y forma parte ya de uno de los momentos cumbres de la relacion cine – musica. La banda sonora ideal para esas imágenes. Ya no se puede concebir la silueta de los edificios neoyorkinos sin la musica de Gershwin.

Rhapsody in Blue es una composición que se adelanto a su tiempo en la que su autor auno de forma sublime la musica clasica con el jazz y el blues. Pero por encima de consideraciones historicas y tecnicas lo mejor es dejarse llevar por esta pieza, un tema vivo frente al que es imposible no caer rendido.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Bruce Springsteen. The Wild, The Innocent & The E Street Shuffle

En su día escribí una entrada sobre las carreras de Mellencamp, Petty y Springsteen. De este último comente que el periodo que va desde 1973 hasta 1983 me parece simplemente perfecto. Sin embargo, hasta hace apenas un año no descubrí sus dos primeros discos. El pasado año el periódico El Mundo presento una colección de discos de Bruce Springsteen. Venia el cd en cuestión con un bonito libreto. Y me pille unos cuantos entre ellos este The Wild, The Innocent & The E Street Shuffle.

La carrera de Springsteen despego a otro nivel (sobre todo comercial) con Born To Run pero sus dos primeros discos ya contienen canciones imprescindibles y bastante diferentes de lo que fue luego su trayectoria. Puedes encontrar en esos dos primeros discos influencias en principio inusitadas. Me pregunto que habría sido la carrera de este hombre si no hubiese aparecido John Landau. El talento hubiese aparecido igualmente pero tal vez hubiese seguido una senda diferente aunque igual de brillante.

The E Street Shuffle abre de forma extraña pero inmejorable el álbum. Un ritmo trepidante con una curiosa percusión latina. Te hace moverte, te arrastra hasta dejarte con suavidad en los brazos de la siguiente 4th of July, Asbury Park (Sandy) una de las canciones mas bellas de este señor y es que cuando entra el acordeón de Federeci … Canela fina. Kitty´s Back recupera la energía del primer tema. Un autentico torrente sonoro donde afloran las influencias blues y jazz. Una joya que interpreto para delirio de mi amigo Grushecky en el Bec hace un par de años.

Con Wild Billy´s Circus Story hacemos una parada para repostar. En un pueblo perdido con la banda sonora ideal. Uno de esos temas que te traslada a otra época. Me hubiese encajado perfectamente en un episodio de Doctor en Alaska en el que el circo llega a la ciudad. Incident On 57th Street tiene una de las mejores intro de la historia: piano, guitarras acústicas, eléctricas que te preparan para lo mejor. Si no te mueves como un poseso al compas de Rosalita (Come out Tonight) es que no tienes sangre en las venas. New York City Serenade es el final soñado. Magia. Si la intro de Incident es increíble esta no se como calificarla.

En fin, tras los conciertos de Bilbao y Valladolid a los que tuve la suerte de acudir el que esto escribe se paso varias semanas en pleno viaje Springsteen. Y este disco sonó prácticamente a diario. En esos días estuve con mi amigo Rober de Dinamarca seguidor de toda la vida de Bruce y con el que también fui a ver a Tom Waits. Aquel dia nuestra interminable charla la acaparo Springsteen. A mis amigos Rober y Grushecky les dedico esta entrada.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

No mancillarás la trilogía de El Padrino!!!!!!

Cuando trabajaba en unos grandes almacenes de los que no haré publicidad aquí me sucedió algo cachondo y surrealista con la trilogía de El Padrino. Un hombre había comprado el pack con la trilogía y todos sus extras. Un cofre muy chulo que se vendía muy bien. El caso es que este cliente venia a devolverlo porque decía que eso no era El Padrino. Argumentaba que el Padrino que el había visto tenia lógica, estaba ordenado cronológicamente y no había esos raros saltos en el tiempo, vamos, los flashbacks de toda la puta vida.

A este hombre le habían dejado un montaje que distribuyo el periodico El Mundo. Era un montaje que el propio Coppola había realizado para la televisión americana en el que efectivamente la película estaba “ordenada”. El tipo pensaba que lo que había comprado era eso. Trate de explicarle que el cofre que se había llevado era el verdadero El Padrino. Que lo de los flashback existia de toda la vida. Pero el tio erre que erre. Yo le insitia y le decía que no le podíamos devolver el dinero si el producto no tenia ningún defecto. Y el tío dale que te pego, que el defecto era sencillamente que eso no era El Padrino. En fin así estuvimos un buen rato ante la vigilante mirada de mi jefe.

Al principio pensé que aquello era una puta broma. Ya sabéis, ¿donde esta la cámara? Pero al cabo de un tiempo me di cuenta de que el tío hablaba en serio!!!! Al final caí en el error de entrar al trapo. De no tomármelo con sentido del humor y en un momento dado le espete al tío, me vas a decir tu a mi que esto no es El Padrino, puedo escribir un libro sobre El Padrino, o algo así. En fin en cuanto lo dijo me di cuenta de que la había cagado.

Esperaba una bronca de mi jefe. Y hubiese tenido razón. Al fin y al cabo cara al público hay que ser profesional y aguantar el tipo por mucho cliente tocacojones que tengas y por muchas situaciones absurdas en las que te veas envuelto. Pero para mi sorpresa mi jefe no me echo la bronca. Me llamo al despacho y cuando entre se empezó a reir. Me dijo “Mira no lo vuelvas a hacer, pero sinceramente me he descojonado con la situación, menuda bronca se ha llevado por no saber como era El Padrino…” En fin de vez en cuando el jefe me llamaba Vito, todo un honor por cierto.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Eurobasket 09, ¿a quién le importa?

No suelo ver casi nunca los telediarios. Entre semana porque no estoy en casa y el fin de semana porque prefiero escuchar música y leer. Pero ayer tenía curiosidad por ver como trataban el baloncesto en TVE. Así que me trague el telediario esperando que llegar a la sección de Deportes. Y pensé, Bueno esta vez abrirán con el basket al fin y al cabo la selección española se juega el oro esta noche. Pues no. Era más importante la liga española de fútbol e incluso la inglesa.

Es cuanto menos curioso comprobar como la mejor generación de deportistas españoles en décadas es tan poco valorada en su propio país. Es decir, imaginemos por un instante que fuese la selección de fútbol la que se la juega. No es que abran la sección de deportes con esa noticia sino que abren el propio Telediario con el tema en cuestion. Y nos hubiesen dado la caca hasta la saciedad. No importa que España en fútbol si exceptuamos la última Eurocopa no se haya comido jamás un rosco. Porque aunque a algunos les joda si comparas el palmares de ambas selecciones lo único que te puede entrar es la risa.

Ayer una excepcional generación culmino un ciclo esplendido que comenzó hace diez años cuando unos cuantos de estos chicos ganaron a Estados Unidos el campeonato del Mundo Junior en Lisboa. Supongo que en la decisión de TVE española de no abrir con esa noticia responde también a que no tienen los derechos de emisión que pertenecían a la Sexta. Pero, joder, ¿no se puede ser un poco mas elegante? En fin, allá ellos. A la noche disfrute con otro excelente partido de la mejor generación de deportistas de ese país tan raro llamado España. Va a ser complicado que vuelva a salir otra hornada de jugadores de este calibre así que a disfrutar de lo que queda con el baloncesto que practican. Mas allá de banderas, audiencias y otras cuestiones.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Pearl Jam. No Code

No Code. El disco de la discordia. Algunos lo consideran extraño, experimental, raro. Otros directamente un truño. Recuerdo que los comentarios de la época incidían en que la influencia de Neil Young había ido demasiado lejos, que la obsesión con el canadiense se había comido la personalidad de la banda. ¡Ni que lo que habían grabado antes hubiese sido tan original!

Se editó hace ya trece años. En su día para mi no supuso una gran decepción como para muchos seguidores de la banda pero tampoco me voló la cabeza como el Vs, que a día de hoy sigue siendo mi favorito. Pero en seguida le pillé el tranquillo y actualmente es junto al mencionado Vs mi disco favorito de Pearl Jam. Algo similar a lo que me sucedió con el Amorica de los Black Crowes.

A nivel de ventas fue el primer gran bajón de la banda y es que no se esforzaron demasiado por promocionar el disco. Es más incluso la elección de Who You Are como single era un suicidio comercial. El disco se alejaba de los himnos del Ten, de la inmediatez y rabia del Vs o del clasicismo del Vitalogy. Si buscaban no ser comerciales lo consiguieron. Pero en el camino encontraron muy buenas canciones. Ni madurez ni gilipolleces por el estilo, grandes temas, distintos pero tan bueno como todo lo anterior.

Se trata de un disco muy variado, tanto que puede despistar. Contiene pequeñas joyas que se alejan de lo previsible. Dos de mis favoritas son In My Tree y Present Tense. Temas que además de diferentes son una puta delicia para los oídos. De esos que tal vez pasen desapercibidos a la primera pero que luego se quedan para siempre. Hay más, dos bonitas canciones acústicas no tan conocidas como las de otros discos pero igual o más brillantes como Around The Bend y especialmente Off He Goes. Este fue el primer disco que grabaron con Jack Irons a la batería y su presencia fue clave. Siempre me gustó su estilo a la batería, tanto como el de Matt Cameron.

Aunque se tilde al disco de mas tranquilo también tiene rock clasicote en la onda de Young como las excelentes Smile y Red Mosquito. Trallazos punkarras como Lukin y otras como Hail, Hail o Habit que poco tienen que envidiar a otras más conocidas. Muy buenos temas en definitiva en un álbum muy vilipendiado y que para muchos inicio un camino nefasto. Para otros supuso otro excelente disco de una banda que afortunadamente sigue en la brecha. Un disco que trece años después sigo escuchando a menudo.

sábado, 12 de septiembre de 2009

El cine español y las subvenciones

Hace ya muchos años que el cine español naufraga en taquilla. En realidad nunca gozó de buena salud. Por más que nos la intenten colar incluso cuando la cuota del cine realizada en España es mayor siempre suele responder a fenómenos tipo Torrente o el Almodóvar o Amenabar de turno. Y es que en este país no hay una industria de cine como tal. Esto no es ni Estados Unidos ni la India. Aquí cuando se hace una película en un porcentaje altisimimo depende de una subvencion. Y ahí es cuando empiezan los problemas y graves.

La inversión de dinero público es muy alta en nombre de la cultura. Y yo tengo mis serias dudas al respecto. No creo que un modelo en el que se depende siempre de la subvenciones sea sano. Y mas viendo los resultados. Palmando siempre pasta. Algunos me podrán decir que cuando se subvenciona algo no se busca necesariamente la rentabilidad económica, que prima el arte o lo social. Pero me parece que el cine que se hace en este país no cumple con ninguna de las expectativas.

Por no hablar del mamoneo que ha existido siempre con el dinero público en España. Y el cine no se libra de eso. Hay un tufillo de oportunismo y favores prestados que salpica a todos los partidos del signo que sean. Supuesto liberales con ataques intervencionistas, socialistas dando palmadas en la espalda a sus amiguitos, gobiernos autonómicos derrochando dinero sin sentido…

Pero no nos confundamos que el modelo de cine sea malo no quiere decir que le tenga tirria al cine español. Hay películas que me gustan y buenos profesionales como en todos los sitios pero el cine para mi es una industria y lo que tenemos aquí y en muchos sitios de Europa dista mucho de ser eso. Supongo que la cuestión es complicada y es posible que no sea nada fácil idear un modelo al margen de las subvenciones pero yo creo que con el dinero de todos hay cosas mas urgentes que mejorar como para invertirlo en supuesta cultura.

martes, 8 de septiembre de 2009

Gran Torino

El pasado fin de semana por fin vi Gran Torino, la última película dirigida e interpretada por Clint Eastwood. Este hombre es un mito viviente del séptimo arte. A menudo comparado con John Ford tanto por su maestría cinematográfica como por su posicionamiento político conservador cuando no facha para unos cuantos. Pero dejo este tema para otra entrada y me centro en el film.

Gran Torino es una película modesta de bajo presupuesto rodada en apenas 33 días. El argumento es sencillo. Un hombre mayor que vive en un barrio residencial de Detroit acaba de enterrar a su esposa con la que se intuye ha tenido un gran relación y ahora está solo. Tiene dos hijos con los que no se entiende y unos vecinos asiáticos por los que siente desprecio. Es un individuo anclado en los valores del pasado. Lucho en Corea, trabajo en la Ford y tiene una preciada posesión el Gran Torino al que hace referencia el título. Pero esta cabreado y desconectado del mundo que le ha tocado vivir hasta que un hecho le hace poco a poco conocer y relacionarse más con parte de su vecindario y por ende con el mundo.

La película trata aspectos como la intolerancia, la convivencia, el racismo, la soledad, la familia… En fin temas muy trillados en el cine con el gran reto para Eastwood de no caer en los tópicos y clichés de siempre. Y aunque no siempre lo consigue si lo hace a menudo sorteándolos con su clase y maestría habitual. El cine es en buena parte una cuestión de mirada. El director de San Francisco tiene una mirada curtida. Lleva en el negocio más de cincuenta años, ha trabajado con los más grandes directores y domina el medio de forma poderosa. Tal vez este material en manos de otro tipo podría ser pasto de telefilm de sobremesa. Con Eastwood se convierte en una gran película.

El film crece según avanza el metraje. Lo que en principio puede parecer una vuelta de tuerca al personaje de Harry el Sucio para echarse unas risas se convierte en una conmovedora reflexión sobre la tolerancia, la vejez o el racismo. Clint Eastwood lleva unas cuantas películas tocando los mismos temas pero lo hace de tal forma que me resulta cuanto menos atractivo y en ocasiones excelente. Y esta película esta en el segundo grupo. Este retrato de un hombre que vive cargado de prejuicios de los que poco a poco va a ir desprendiéndose esta contada no solo de forma brillante sino creíble. Y me alegro de que escogiese ese final. Me alegra que a pesar de toda la mierda que nos rodea y de lo enferma que está la sociedad en muchos aspectos todavía haya un poco, aunque sólo sea un poco de esperanza.

sábado, 5 de septiembre de 2009

Hard Rock Vs Grunge, Rock´n Roll Attitude

En el mundo del rock´n roll siempre ha jugado un papel muy importante la imagen y la tan cacareada actitud. El otro día estaba viendo El luchador y en un momento de la película el personaje de Mickey Rourke le dice a Marisa Tomei que odia los noventa. Esta asiente y le responde que parece que en esa época era un delito pasárselo bien.

Una de las máximas que se han impuesto en los últimos años es que el grunge mató al hard rock. Que la música festiva y desinhibida y la actitud chulesca y de irse a comer el mundo y todas las mujeres que en él habitan feneció por obra y gracia de esos tipos de Seattle con sus camisas de leñadores, su actitud atormentada y el rollo políticamente correcto. En el primer bando estaban bandas como Motley Crue, Guns N´ Roses, Cinderella, Ratt, etc y en el segundo Nirvana, Pearl Jam, Soundgarden o Alice In Chains por citar solo a los más populares.

Bien no se puede negar que hay buena parte de verdad en todo esto. Y es que los noventa en muchos sentidos fueron muy claustrofóbicos. El grunge puso de moda una estética e ideales que a priori poco tenían que ver con la diversión y el desenfreno juvenil. Pero eso es la teoría, lo que hay en la superficie. Una generalización más que como todas tiene parte de verdad y de mentira. Echo la vista atrás y recuerdo por ejemplo el año 93 y aunque la MTV pretendiese lo contrario la fiesta continuaba igual. No recuerdo a grunges llorando por las esquinas sino más bien en el mismo bar disfrutar por igual con Guns N´ Roses, Cinderella, Pearl Jam, Soundgarden o Van Halen.

Durante una buena época algunas revistas se cargaron y todavía lo hacen todo el legado grunge. Y hablo de música. A mi los discos de Alice In Chains, Screaming Trees, Soundgarden o Pearl Jam me siguen sonando a gloria independientemente de asociarlos con una época concreta de mi vida. Superan de sobras el paso del tiempo. Hay otras bandas que escuchaba en aquella época de las que soy incapaz de escuchar tres canciones seguidas como Rage Against The Machine, Smashing Pumpkins o Live.

Pero bueno me detengo en lo de enfrentar a dos estilos a priori tan opuestos. Aunque me cuesta hacerlo porque no se qué cojones es el grunge. Y por otro lado no puedo meter en el mismo saco a los Crue, Poison o Guns N´ Roses. Creo que más allá del lugar de procedencia había casi tantas diferencias entre ellas como similitudes. Y eso es aplicable a las dos etiquetas. Incluso ambos estilos tan opuestos sobre todo de cara al rollo estético y de actitud bebieron en muchos casos de las mismas fuentes: Beatles, Stones, Zeppelin. Luego otra cosas es como lo presentaban al público.

Echó la vista atrás y recuerdo por ejemplo al año 92 vibrar por igual con muchas bandas diferentes entre sí. En mi caso recuerdo que había un predominio del llamado grunge pero al mismo tiempo descubrir a los Cuervos, a Zeppelin con el Remasters, empezar a flipar con la discografía de Tom Petty, el album negro de Metallica, poco después empezar a gozar con Earle, Jayhawks o Social Distortion…. En definitiva música diferente más allá de etiquetas y supuesta actitud. Y así sigo a día de hoy me puedo identificar mas o menos con ciertas bandas pero para mi la música es lo fundamental por encima del envoltorio.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Cadillac Records

Como los planes que tenía previstos para estas vacaciones han variado he aprovechado este tiempo para disfrutar de la música y el cine con más relax. Ayer por fin vi Cadillac Records la película que cuenta la historia del mítico sello Chess donde triunfaron algunos pioneros como Muddy Waters, Chuck Berry, Howling Wolf y Etta James. Es un film entretenido. Me gustaron sobre todo los actores y la ambientación está muy lograda, aspecto que suele ser habitual en el cine de Hollywood.

Pero me esperaba mucho más. No soy ningún erudito en blues (qué hostias no soy erudito en nada) y en la historia del sello pero muchos datos ya los conocía y la película se me queda corta. Se apuntan muchas cosas pero casi ninguna se desarrolla en profundidad. Leves pinceladas de la tensión racial de la época, una desaprovechada historia de rivalidad entre Wolf y Waters, a los personajes de Chuck Berry, Wille Dixon Etta James se les podía haber sacado mucho más jugo, el tema de los derechos de las canciones... Pero bueno también he sido un poco ingenuo al esperar algo más consistente. Ya sabemos como es Hollywood en muchas ocasiones. Algo similar me ocurrió con la de Johnny Cash.

En cualquier caso es una película entretenida. Esta mañana lo primero que he puesto en el equipo de música ha sido un recopilatorio de Chuck Berry de su época en el sello Chess. Esa clase de discos inmortales con 20 clásicos de este singular tipo. Cuando terminó la peli pensé joder podrían hacer perfectamente una sobre cada personaje importante que aparece en el film, una sobre Muddy Waters, otra sobre Little Walter, otra sobre Howling Wolf, una más sobre Etta James. Aunque como me dijo Susana quizá lo que busco lo pueda encontrar más en buenos libros sobre todos esos artistas.

Otro aspecto es sobre cuanto es realidad y cuánto ficción. Desconozco si es cierto el dato de que Leonard Chess compró al Dj Alan Freed para que pinchase la música de su sello, no se hasta qué punto es verdad que Muddy Waters estuviese tan cerca de Chess todo ese tiempo… En fin lo dicho esas respuestas tal vez tenga que buscarlas en otro sitio.