1994. Los hermanos Robinson entran en el estudio para grabar su tercer disco. Atrás quedan un impactante debut en el 90 con Shake your Money maker y una continuación aún mejor en el 92 con The southern Harmony and Musical Companion (por cierto siempre me ha encantado ese título). Está claro lo que les gusta a Chris y Rich Robinson Basta escuchar esos discos para saber que en la dieta musical de estos tíos los Faces son el pan suyo de cada día. Sobre todo en el primero. El segundo explora otros caminos y mejora mucho los resultados.
Ambos son un descomunal éxito de ventas y en esa tesitura es fácil acudir borracho de ego al estudio y grabar cualquier ponzoñada o poner el piloto automático. Nada más lejos de la realidad. Estos tíos aman la música y lo van a demostrar. Van a dejar para la posteridad una obra de arte: Amorica. Un título alegórico, un poco de provocación en la portada y lo mejor de todo una música exquisita y las mejores letras de su carrera. Aquí los hermanos Robinson aportan su sello personal e intransferible. Dejan su huella en la Historia.
Nada se les resiste a Black Crowes en este disco: blues rock, psicodelia un aroma a jam por todos los lados… Y sobre todo una ristra de canciones que tira de espaldas. Ni una de relleno. Todo aprovechable y ejecutado con maestría. Mención especial para un Marc Ford en estado de gracia. No pasa semana sin que escuche este disco. Funciona tan bien como jam, para escuchar del tirón como las canciones sueltas. Cursed Diamond, She gave good sunflowers, Ballad in urgency y Wiser time unidas por unos bellos arpegios. Y un final que te aplasta: Descending.
Have mercy baby
Im descending again
Open your eyes
This time its sink or its swim
No sermons on ascending
No verdict on deceit
No selfish memorandum
No confusion for me
Chorus:
Curses
Curses and clues
A feast for fools
Have mercy baby
And hand me downs
It was just a few years ago
Youd hand me ups and map
Right out of town
But I would let it slide
Like mercury
Silver and quick
Poisonous and deadly
So deadly