martes, 15 de enero de 2013

The very best of Blues Brothers


John Belushi y Dan Aykroyd se conocieron en el Saturday Night Live el programa en el que trabajaban ambos a mediados de los setenta. Un show que se convirtió en referencia de la televisión norteamericana teniendo como armas un humor desinhibido y desenfrenado. Hoy en día se pueden consultar en Youtube multitud de sketchs que forman parte de la cultura norteamericana. A estos tipos que trabajaban junto a Chevy Chase o Bill Murray no se les ponía nada por delante. Iban a por todas y no se cortaban un pelo.

Tanto Belushi como Aykroyd eran unos melómanos de cuidado. Al primero le gustaban las bandas clásicas del rock´n roll y pronto se metió a fondo en el punk lo cual iba de perlas con su personalidad. Belushi era un tipo alejado de los formalismos y de la corrección política y vivía al límite. Por su parte Dan Aykroyd era un loco de las motos y un apasionado del soul y del blues, veneno que le inculcó con éxito a Belushi. Fue en 1978 cuando a Belushi se le ocurrió amenizar partes del programa con un poco de música. El proyecto empezó como un divertimento pero se convirtió en algo grande, muy grande. No sé cómo consiguieron Belushi y Aykroyd traer a su banda a talentos del calibre de Steve Cropper, Donald Duck Dann o Tom Malone pero lo cierto es que ahí estaban pasándoselo de cine con los alter egos de Belushi y Aykroyd: Joliet Jake Blues y Elwood Blues. El primero encargándose de las voces y el segundo ayudándole en tareas vocales y dándole a la armónica.

Muchos clásicos del soul los escuché por primera vez cuando adquirí este recopilatorio de Blues Brothers. Aquí están Everybodys needs someboby to love (Solomon Burke), Soul man (Sam & Dave) o Think (Aretha Franklin).Afortunadamente los Blues Brothers fueron muy populares y lo escribo así porque siempre era una gozada estar por ahí de parranda y que cayese algún tema de estos tipos para animar la fiesta. Entre una selección musical habitualmente pauperrima en casi todos los bares en algunos siempre caía algún tema de estos tipos.

El proyecto de estos tipos fue una forma divertida, honesta y muy real de homenajear a los grandes de la música negra. La primera vez que supe quiénes eran Ray Charles, Aretha Franklin o James Brown fue por su presencia en la mítica Granujas a todo ritmo que vi por primera vez en una sesión de cine al aire libre que solían hacer en mi pueblo en el verano. Y seguro que a miles de personas les sucedió lo mismo que a mí y se lanzaron poco a poco a buscar las canciones originales que figuraban en la película.

De modo que durante años mi bagaje soul y blues se limitó a este recopilatorio de los Blues Brothers. Y le guardo cariño por varios motivos: la música que contiene es de muchos kilates y además está ejecutada con maestría, es ideal para levantar el ánimo en días lluviosos como el de hoy y es una magnífica puerta de entrada para bucear en las raíces del asunto. En las entrevistas que he leído a Dan Aykroyd (que hoy en día es copropietario de la cadena House Of The Blues) siempre se muestra orgullos de esta etapa de su vida y no se cansa de repetir que fue un homenaje a los músicos negros estadounidenses. El repertorio que trae este cd es imbatible y puede ser un muy buen inicio para profundizar en esas raíces de las que habla Aykroyd