miércoles, 22 de mayo de 2013

En busca del salvoconducto

Victor Laszlo lo tenía complicado en Casablanca para conseguir dos salvoconductos que le posibilitasen salir de la ciudad. Dependía como casi siempre de la suerte y en buena medida de Rick un tipo que iba de duro pero que en el fondo se guiaba por su sentido de justicia. Finalmente Laszlo lo consigue. Como tiene que ser. Espero tener la  misma suerte que él y lograr mi particular salvoconducto antes de que el reloj de arena reviente. En mi caso servirá para prolongar un mes más eso de ir al trabajo andando. Porca miseria. Los tiempos están chungos pero que muy chungos y hay que agarrarse a cosas impensables. Y encima como me decía un amigo el otro día hay que estar contento de tener laboro...