viernes, 5 de octubre de 2012

Loretta Lynn. Van Lear Rose


Jack White es uno de los músicos que más opiniones a favor y en contra aglutina de la última década. Con su grupo principal White Stripes ha gozado de un apreciable éxito de ventas y critica y a menudo se le ha señalado como el líder de una supuesta escena de grupos en Detroit. Es uno de esos músicos que despierta tantas filias como fobias. A mi reconozco que la música de su banda jamás me ha vuelto loco, más allá de algunas canciones, pero el tipo, el personaje me parece interesante. Y lo que intensifica esa sensación es que el hombre se ha involucrado como productor en unos cuantos discos atractivos y ha colaborado hasta con el mismísimo Bob Dylan y los Rolling Stones. Esas cosas uno las tiene en cuenta. Aunque no son desde luego definitivas.

Lo cierto es que en este Van Lear Rose acierta de pleno. Sabe elegir el sonido, potencia las cualidades de Loretta y consigue momentos rockeros que se convierten en clásicos instantáneos.  Al parecer en el estudio el amigo White acabo hasta los mismísimos de la diva del country. Tal vez eso sea bueno y moneda común, ya que los conflictos en estudio han estado a menudo ligados a espléndidos resultados.


Aquí la partida viene ganada desde la elección de los temas. Pegajosos y directos como ese tremendo Have Mercy con regusto zeppeliano que justo cuando termina engancha con la vitalista High on a mountain top con un eufórico toque gospel o como el propio dueto que se marca Jack White con Loretta en Pórtland Oregon, donde la mujer le pega un repaso a Jack. Es curioso el contraste que se da en esta canción con la vocecilla de Jack y la contundencia de Loretta. Queda muy chulo.


Hay un bonito equilibrio entre temas con un inequívoco resgusto country como la delicada Trouble on the line o la más follkie pero igual de irresistible Family Tree o las más rockeras Have mercy, Pórtland Oregon o Mrs. Leroy Brown. El asunto se resuelve en cuarenta y pocos minutos rebosantes de talento e inspiración. La señora Loretta logró dar una buena patada en la mesa y presentarse en el mundillo rockero para que ignorantes como yo disfrutasen con su música. A mi me ganó desde la inicial y arrebatadora Van Lear Rose. Me gusta como canta y su voz. Lo que no siempre va unido. Ni se las veces que he puesto Van Lear Rose como inicio para un día soleado como el de hoy.