En 1968 Solomon Burke publicó su último disco en Atlantic. Su trayectoria en el sello mítico neoyorkino se inició en 1962 y es un compendio del mejor soul y r&b primigenio. Burke fue uno de esos pioneros que allanaron el camino al resto y que cosechó sus mayores éxitos en esos primeros años. En Atlantic gozaba de prestigio y aunque las ventas no eran escandalosas y estaban lejos de las de Ray Charles era un artista apreciado por el sello. Jerry Wexler y Bern Berns confiaron en su talento y el de Philadelphia les correspondió con media docena de discos a tener en cuenta, los más destacados los dos últimos que despachó para la compañía fundada por Ahmet Ertegun: King Solomon y I Wish I Knew.
La marcha de Burke de Atlantic no estuvo exenta de polémica. El cantante siempre dijo que el sello boicoteo su proyecto Soul Clan porque daba demasiado poder a los artistas negros y eso pesó en su decisión de abondar la discográfica neoyorquina. Problemas de royalties, composiciones que no le eran asignadas cuando había contribuido a su creación... Todo contado desde la perspectiva de Burke. Habría que cotejar el otro lado. Aunque qué leches yo le creo, ja, ja. Además, Solomon siempre fue partidario de las teorías de la conspiración. Nunca creyó la versión oficial sobre la muerte de Sam Cooke y por supuesto estaba convencido de que Atlantic conspiró contra el Soul Clan.
I Wish I Knew es el mejor colofón posible a su relación con Atlantic. Conocía hasta cinco temas que vienen el fundamental Home in your heart: The Best of Solomon Burke entre ellas el megaclasico conocido en la voz de Nina Simone I Wish I Knew (How It Would Feel To Be Free) que aquí sirve de fabulosa apertura. A la excelsa interpretación vocal de Burke se le suma unos coros fantásticos al parecer cortesía de las Sweet Inspirations que se salen y aportan un toque mega cool en la siguiente: Get Out Of My Life Woman original del gran Allen Toussaint. Un lujo habitual en Atlantic al igual que contar con Tom Dowd a la producción.
Los cuatro temas que no había escuchado son tan buenos como los que venían en el recopilatorio: By The Time I Get To Phoenix, Then You Can Tell Me Goodbye, Shame On Me y Why, why, why... Todos ellos incandescentes números de profundo soul sureño del que me vuelve loco y que cuentan con un Solomon Burke en plena forma. Me encanta las partes habladas en Then You Can Tell Me Goodbye, como se come el clásico country By The Time I Get To Phoenix y lo transforma en una arrebatadora pieza soul, la locura que se vive en What´d I Say, la despampanante Save It uno de esos números en los que la todopoderosa voz de Burke se lo lleva todo por delante de nuevo con la inestimable colaboración de las Sweet Inspirations. Dame mas soul please, Solomon Burke the king of rock´n soul.
Los cuatro temas que no había escuchado son tan buenos como los que venían en el recopilatorio: By The Time I Get To Phoenix, Then You Can Tell Me Goodbye, Shame On Me y Why, why, why... Todos ellos incandescentes números de profundo soul sureño del que me vuelve loco y que cuentan con un Solomon Burke en plena forma. Me encanta las partes habladas en Then You Can Tell Me Goodbye, como se come el clásico country By The Time I Get To Phoenix y lo transforma en una arrebatadora pieza soul, la locura que se vive en What´d I Say, la despampanante Save It uno de esos números en los que la todopoderosa voz de Burke se lo lleva todo por delante de nuevo con la inestimable colaboración de las Sweet Inspirations. Dame mas soul please, Solomon Burke the king of rock´n soul.