viernes, 29 de mayo de 2009

Sobre las jams...

Ay, las jams. Dividen al personal. Esos temas que en disco apenas duran cinco minutos y que en directo alcanzan sin problemas los quince o veinte. Esas idas de olla para algunos alardes de genialidad para otros. Que difícil es contentar a todo el mundo. Mision imposible diría yo. Todo este devaneo me viene a la mente recordando el impresionante concierto que dieron los Black Crowes en el Azkena. En Vitoria los Cuervos dieron suelta a toda su sabiduría musical y lo bordaron tanto en los temas mas directos como cuando se sumergían en sugerentes jams en las que brillaron todos con mencion especial para Luther Dickinson.

Vaya por delante que no soy lo que se entiende un fanático de las jams. Tampoco las odio. No soy de los que recorre medio mundo siguiendo a los Grateful Dead, Phish o los Allman Brothers. Pero eso no quiere decir que no disfrute y mucho con los devaneos instrumentales de los grupos. Depende del momento y de los intérpretes y el otro día en Vitoria todos los astros se conjuraron para que los hermanos Robinson y compañía acariciasen nuestros oídos con su maestría habitual.

Pero bueno no siempre me seducen las jams. Supongo que como a todo el mundo. Es más hay grupos consagrados, intocables para muchos, qué a mi cuando se zambullen en las pantanosas aguas de las jams se pierden… Dice Nick Hornby que cuando Led Zeppelin atacaban Dazed And Confused (que podía durar más de media hora) se iba con sus colegas a la barra del bar, iba a mear, pedía un par de rondas y cuando volvía allí seguía la jodida canción… Apoyo la moción. Me quedo mil veces antes con los Zeppelin más directos y con sus coqueteos acústicos.

Un colega odia a Pink Floyd. Shine On Your Crazy Diamond, dice, joder voy al baño me afeito, me ducho, meo y continua la puta canción. A mí sin embargo me encanta. Más. Mi amigo Ander flipó con Marc Ford y Steptwater Band cuando tocaron en Sestao hacer un par de años. A mi sin embargo aquellos conciertos se me hicieron en ciertos momentos muy pesados. Y después cuando les vi en una sala me gustaron mucho más. Depende del día supongo.

En fin no me imagino a alguno de mis músicos favoritos enfrascados en largos desarrollos instrumentales. A priori no es algo que vaya con Social Distortion, Pearl Jam, AC/DC, Steve Earle o Monster Magnet. Pero quién sabe. Algunos son tan hábiles cuando van al grano como cuando se decantan por el jugueteo instrumental. En esa categoría encajan para mi Pink Floyd, Allman Brothers Band, Lynyrd Skynyrd e incluso Tom Petty y Bruce Springsteen alargan temas con mucho fundamento. Y por supuesto The Black Crowes. Y en ocasiones incluso Neil Young. Esperemos que el domingo sea uno de esos días.

viernes, 22 de mayo de 2009

Soundgarden. Badmotorfinger

A raíz de una entrada en el blog de Rockland sobre The joshua tree me ha venido a la mente la gran cantidad de músicos que lo tiran todo por la borda. La lista de sujetos que encajan aquí es larga pero uno de los que me tienen mas perplejos ultimadamente es Chris Cornell. Incluso Susana que es la persona más comprensiva del mundo y da mil y una oportunidades a todo quisqui me comento tras ver el último video de este sujeto que era denigrante. Pero bueno, no importa lo bajo que caigan los músicos sus obras perduran y les superan. Así que no voy a regocijarme en lo patético que es actualmente Cornell. Vamos a fundir a negro. Y flashback.

En 1991 la historia era muy distinta. Soundgarden estaban a punto de grabar su primera gran obra y ya habían llamado la atención de muchos fans, algunos tan famosos como Robert Plant o Axl Rose. La entrada en el grupo de Ben Shepherd por yashiro doto a la banda de un nuevo y versátil compositor. Shepherd era un tipo peculiar, que se movía de forma poco ortodoxa en el escenario y que siempre parecía estar en otra onda. Además era un gran admirador de Led Zeppelin lo que se notaria en las futuras composiciones de la banda.

De modo que con Chris Cornell a la guitarra rítmica y la voz, Kim Thayil a la guitarra solista, Ben Shepherd al bajo y Matt Cameron a la batería y ocasionales coros, Soundgarden editaron en 1991 Badmotorfinger uno de los mejores discos de ese año. El álbum que les situaría en la liga de los grandes. Aquel con el que alcanzaron la barrera psicológica del millón de copias vendidas en el mercado americano. Y lo hicieron con un disco que era todo menos comercial. No hay ninguna concesión por parte de la banda. Solo heavy metal de alto voltaje. Porque no nos engañemos este es un disco que encaja en ese género a la perfección. Aquí la etiqueta grunge no tiene ningún sentido.

El disco se abre con el psicótico y machacante riff de Rusty Cage uno de esos inicios trepidantes que te prepara para lo que se avecina. Outshined continúa en esos parámetros. La sombra de Black Sabbath planea por todo el disco con resultados espectaculares. En Slaves & Bulldozers Cornell fuerza su garganta hasta límites insospechados. Pocos podían cantar como este hombre. En dos de mis temas favoritos, Room A Thousand Years Wide y Drawing Flies, la música es del gran Matt Cameron, un batería soberbio. Lo demuestra con creces en este disco y se sale en el siguiente, Superunknown.

En cuanto a Ben Shepherd firma en solitario otra de mis favoritas, Somewhere y compone la música de Face Pollution. En este disco todos arriman el hombro en la composición con resultado sobresalientes dando forma (a como Kim Thayil lo definió) el Album Blanco del Heavy Metal. Con un par, Thayil.

lunes, 18 de mayo de 2009

Azkena Rock Festival 16-05-09

El sábado tras dormir apenas cuatro horas me despertó Unax. Se acercó a la cama y me dijo: Aita, Rock!!! Y del mejor hijo. La mañana del sábado la pase en estado de excitación. Recogí la casa, estuve con Unax en el parque, grabe un cd para el viaje y hasta las cinco estuve con mi familia. En armonía y nervioso ante la que se avecinaba.


A las 17:00 salimos para Vitoria. Pasamos por Gallarta a recoger a Ander. Llegamos y ahí nos esperan en las campas Iñigo, Itxaso y Grushecky. Se palpa el cansancio. Diego parece perjudicado, pero es un toro. Ander es indestructible, Idoia tiene los genes de su hermano y yo estoy como un puto fraguel. Mike Farris tiene la pocima adecuada.

En el mismo escenario en el que el día anterior Eli Paperboy Reed hizo de las suyas Mike Farris va a elevar nuestras miserables almas y cuerpos. El poder de la música. Farris ejerce de maestro de ceremonias y la banda que lleva es de lujo. Caen temas del fantástico disco Salvation In Lights: Sit Down Servant, Streets Of Galilee, I´m Gonna Get There… Farris ha nacido para cantar. En solitario, con una banda como la que lleva ahora, con Screaming Cheetah Wheelies, con gitanos rumanos…. Puede hacer lo que quiera. Es el puto amo.

Se muestra comunicativo y da cancha a su banda. Claro, es que no hacerlo sería estar ciego. Todos aportan y en el escenario se notan las buenas vibraciones. Las McCrary Sisters que le acompañan a las voces tiene su bien ganada cuota de protagonismo como el resto de la banda. Pero esas dos mujeres, las nos llevan más allá. Interactúan con Farris a la perfección y cuando toman el mando de la canción eso es el éxtasis. Te apabullan, elevan tu espíritu, te recuerdan una y otra vez el poder de la música. Farris es un hombre feliz y lo que vemos es una celebración de la música de la que todos somos partícipes.

A las 22:30 en el escenario grande Fun Lovin´ Criminals vuelven por estos lares y Ander y Diego me comentan tras el concierto que estos muchachos se están echando un poco a perder. Y tal vez tengan algo de razón. El concierto me gustó porque sonaron grandes temas y porque Huey sigue siendo un cachondo pero creo que hace falta un poco más. Las versiones de Foxy Lady de Jimi Hendrix y Rock´n Roll de Led Zeppelin fueron de lo mejor. Pero también sonaron grandes canciones del trio como Korean Bodega, Smoke Em, King Of New York o I Can´t Get Whit That. Fueron tan solo 55 minutos con un buen repertorio pero muy corto.

La espera para que saliese Alice Cooper se nos hizo eterna. A esas horas el cansancio hace mella y Vincent Damon Furnier y su banda salieron con 20 minutos de retraso. Pero mereció la pena. Sin duda. Alice Cooper lleva una banda solvente donde destaca el ya veterano Chuck Garric verdadero alma de los músicos que le acompañan. Y un repertorio repleto de clásicos que resiste el paso del tiempo. Grandes temas que no te cansas de escuchar jamás: Schools Out, I´m Eighteen, Is It My Body, Billion Dollar Babies. Y fin de fiesta con Elected para mi una decision perfecta.

También sonaron del Dirty Diamonds, la que da título al disco y una de mis favoritas, Woman Of Mass Distraction. Alice tiene cuerda para rato. El espectáculo que se montan como siempre no está nada mal aunque sinceramente si no hay buenas canciones detrás de poco serviría. Y Alice Cooper las tiene a manta. Como siempre el momento de Welcome To My Nightmare destaca, es cuando el show alcanza su máximo apogeo. Y Alice lo sabe y lo sigue haciendo tan bien como siempre. Tras algo más de hora y media de show Alice abandona el escenario sabiéndose de nuevo vencedor.

Azkena Rock Festival 15-05-09

Todavía me dura la euforia que hemos vivido en esta nueva edición del Azkena Rock Festival. Un evento que lleva unos cuantos años ofreciéndonos carteles de ensueño. Así que no esta mal en un país en el que predomina la queja felicitar a los que hacen posible un festival de estas características donde la música es lo mas importante.

El viernes partimos hacia Vitoria a eso de las 15:45 con la intención de disfrutar con Howlin Rain pero cuando llegamos tan solo les podemos escuchar a lo lejos mientras aparcamos así que nos quedamos sin el primer objetivo pero hay suficientes grupos con los que contentarse. Y de qué manera además. Los primeros a los que vemos son Ellioott Brood un trío folky de música americana que con sus banjos, acústicas y entusiasmo nos dan una bonita bienvenida. Lo mejor esta por llegar.

Eli “Paperboy” Reed sale a eso de las 19:00 tras una presentación a la vieja usanza por parte de uno de los componentes de su magnifica banda. Este chico ha llamado la atención de la prensa musical y de muchos seguidores. Mimetismo, calco, algunos le han colgado esa etiqueta pero sinceramente a mi el chico me pareció un huracán. A un tipo de 24 años que canta así y que tiene canciones tan buenas como Am I Wasting My Time o Satisfier solo le puedes pedir que siga componiendo por el resto de sus días. Excelente voz, gran banda y una música que se apoderó de los allí presentes, la clase de musica que te da un subidón imparable. Una puta gozada. Así de claro.

En los festivales hay muchas bandas que ver y un cuerpo que no puede resistir todas. Te buscas tus descansos y vas con un objetivo claro. El viernes nos olvidamos de The Zombies, particularmente no les controlo nada y con The Fabolous Thunderbirds nos lo tomamos con calma viéndolo lejos, con relax más cerca de la barra que otra cosa.

A las 22:00 nos dirigimos al escenario principal para ver la actuación de Soul Asylum lo más cerca posible y así luego estar bien situados con The Black Crowes. No me esperaba gran cosa de Soul Asylum. Tan solo tengo un par de discos muy abandonados pero el otro día en Vitoria me gustaron lo suficiente como para que me entre el gusanillo de volver a escucharlos en casa algún día.

Lo de Black Crowes va a ser difícil de explicar. A eso de la medianoche las buenas vibraciones y la armonía musical se apoderaron de las campas de Mendizabala y de los allí presentes. Iba a escribir que fue un inicio espectacular pero no sería justo porque todo el concierto fue una puta celebración del rock´n roll con una de las mejores bandas de la historia. Qué a gusto me he quedado. Sting Me abrió la caja de los truenos y la tacada compuesta por Twice as a hard, Goodby Daughters of the Revolution, Hotel Illness y Soul Singing nos llevó en bolandas.

Los Cuervos salieron a disfrutar con la música y nos hicieron gozar con sus múltiples facetas. Eligieron un repertorio plagado de exitos, sonaron Hard To Handle, Jeaolus Again o Remedy y lo combinaron a la perfección con increíbles jams que particularmente me hicieron estar en la gloria toda la noche con una sonrisa de millonario. Mi momento favorito fue cuando Chris Robinson entonó aquello de When me when the day breaks, Show me how the sun shines, tell me about your heartches, Who could be so unkind…. My Anges, my devils a THORN IN MY PRIDE... Esta canción la alargaron con su clase habitual y aquí me quiero detener en un tipo: Mr Luther Dickinson. Con los Cuervos las cosas funcionan mucho a impulsos y no se que pasará con Luther si seguirá o se centrará en Norht Mississippi Allstars pero desde luego el hombre encaja a la perfección en la banda. Como guitarrista no tiene nada que envidiar a Marc Ford, es más en mi opinión le supera y como compositor ya ha demostrado de lo que es capaz con NMA. Que no lo dejen ir jamás. Es más si volviese Marc Ford que se quede Luther también, que sean tres guitarristas.

El resto de la banda transmite tantas buenas vibraciones como lo hace Chris un tipo extrovertido que baila y goza de la música delante de miles de personas siendo capaz de llevarte a su terreno como los más grandes han hecho siempre. Un puto crack. Rich, bueno ya sabemos como es Rich se expresa menos que Derek Trucks de los Allman pero como éste es otro excelente músico. El cerebro de los cuervos. Parece enfadado pero supongo que el hombre disfrutará…

La pegada de Gorman sigue siendo precisa. Contundente cuando el tema lo requiere, sutil cuando la canción lo pide. Otro imprescindible. Las coristas dan ese toque fundamental en la música de estos tipos y el bajista Sven Pipien parece el hermano enrollado de Chris y el teclista Adam Macdougall cumple tan bien como en su día Harchs.
De Warpaint también sonaron Goodbye Daughter of The Revolution, Oh Josephine y Wounder Bird con la que cerraron. De Amorica la maravillosa Wiser Time. Pero tienen un repertorio tan amplio y son tan conscientes de ello que hoy tocan estas y mañanas otras y la magia seguriá ahí. Armonía es la palabra. The Southern Harmony And Musical Companion. Ese título resume lo que sentí esa noche. Dilo alto ya veras que bien suena.

lunes, 11 de mayo de 2009

Social Distortion. Somewhere Between Heaven And Hell

Apenas a un mes vista del concierto de Social Distortion en la Rock Star Barakaldo me animo a escribir un poco sobre este disco. En el Ruta 66 de este mes viene un recomendable artículo firmado por Eduardo Izquierdo sobre la banda del gran Mike Ness. Un combo que para el tiempo que llevan juntos no tiene una discografía muy larga. En más de veinticinco años tan solo seis discos de estudio. Todos recomendables y algunos de ellos muy buenos como este Somewhere Betweeen Heaven And Hell.

De este álbum dijo Bruce Springsteen que era lo mejor que había escuchado en mucho tiempo. Supongo que al de New Jersey como a tantos de nosotros le cautivó la poderosa fuerza de unas canciones que cantadas con toda su alma por Mike Ness beben por igual del punk, rock o country. De sobras es conocido el gusto de Ness por todo el material clásico de los cincuenta y en este disco ese poso alcanza momentos espectaculares. Algunas de las mejores canciones que había compuesto hasta la fecha están aquí: Bad Luck, Born To Lose o This Time Darlin.

Producido por Dave Jerden y publicado en 1992 , Somewhere Between Heaven And Hell es la perfecta continuación del también muy notable Social Distortion de 1990. Aquel ya supuso un reconocimiento claro por parte de Ness de que en su vida pesaban tanto los Ramones como los Stones o Johnny Cash. A pesar de que el primer disco que tuve de Social Distortion fue el tremendo White Light, White Heat, White Trash con el tiempo este se ha convertido en mi favorito y espero que caigan unos cuantos temas en Baracaldo. Y es que hay ganas de volver a gozar con el directo de estos tipos que ya me noquearon en el Azkena de 2004.

Y es una alegría comprobar que bandas como Social Distortion han sido capaces a sobrevivir a todo tipo de desgracias. Uno de esos grupos que ha ido consiguiendo una base de fans cada vez más amplia, que se lo han trabajado y que han tenido la pizca de suerte suficiente para seguir aqui en plena forma casi treinta años después. Brindo por ellos.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Out Of The Past (Retorno Al Pasado)

Como les ocurrió a tantas otras películas enclavadas en el cine negro, Retorno al Pasado (Out Of The Past en el original), debe su fama a la reivindicación que la muy bien considerada Cahiers Du Cinema, la Biblia de los cinéfilos, realizó de los film noir en la década de los sesenta. Cuando se estrenó en 1947, Retorno al pasado tuvo una acogida normalita tanto en lo comercial como en lo artístico. Pero benditos aquellos tipos franceses que elevaron esta y otras películas hasta hacerlas populares.

A menudo se ha tildado este film de serie B pero esta lejos de esos parámetros. El rodaje fue de 64 días lo que la elevaba de la media habitual y dispuso de más medios que otras películas de cine negro. Sin grandes alardes pero con la logística suficiente. Aunque los actores principales todavía no eran unas estrellas estaban muy cerca de ese estatus. Esta película les dio un empujoncito mas, sobre todo a Robert Mitchum y Kirk Douglas.

Así pues con un equipo artístico joven y prometedor y un director que sabía lo que se traía entre manos no es de extrañar que Retorno al pasado sea una de las mas bellas y emocionantes películas que he visto en mi vida. Más allá de la muy honorable etiqueta de cine negro Out of the past es un película sumamente original porque a pesar de que cuenta con muchos elementos propios del género (la dicotomía campo-ciudad, la femme fatal, los flashbacks, la voz en off…) los combina de tal forma que la hace diferente, va un paso más allá.

La fatalidad, la tentación, la codicia están tan bien retratadas, son tan creíbles que asustan. Uno observa al personaje interpretado por Mitchum con desesperación, con ganas de darle un meneo y advertirle de lo que le espera, pero conforme avanza la película te dejas arrastrar por el mismo halo que envuelve a su personaje. No hay nada que hacer.

Como he mencionado Retorno al Pasado es hoy en día un clásico del cine por muchas razones. Uno de los aspectos a los que debe su fama es la iluminación. Tourner y el director de fotografía Nicholas Musuraca se entendieron a las mil maravillas para dar con el ambiente propicio. Tanto los interiores como los exteriores se benefician de una forma de iluminar diferente desafiando los cánones habituales. Y qué decir de los diálogos. Certeros, precisos, como cuchillas de afeitar.

Jeff Bailey: Acostumbro a no husmear en los asuntos de las mujeres, pero qué es para ti ese tipo, Fisk.
Alsfla: Por mi no cambies tu costumbres.