domingo, 26 de agosto de 2007

New Orleans forever!

Ayer fui al Teatro Arriaga en Bilbao a ver La Revista negra una comedia musical dirigida por Jérôme Savary. Creo que es la cuarta vez que voy al teatro en mi vida y salí pletórico tras asistir a una representación divertida, entusiasta y que te hace pensar.

La función arranca en las jaulas del zoo del Jardin des Plantes, donde en 1932 tuvo lugar una exposición sobre las tribus africanas que visitaron más de un millón de personas. En la siguiente escena pasamos a New Orleans en 2005. En las ruinas de la ciudad nos encontramos con un pianista de jazz y un cantante de gospel que buscan sus pertenencias bajo el agua. A éstos se les suma un productor de espectáculos francés que está buscando a una nueva Joséphine Baker.

Josephine Baker fue la protagonista de La revue nègre, un espectáculo estrenado en París en 1923. La cantante aparecía con un cinturón de plátanos secundada por músicos de jazz y bailarines afroamericanos. En aquella época en el Estado francés a diferencia de en Estados Unidos no regían las leyes que impedían a la población negra entrar en bares y el espectáculo de la Baker era recibido con entusiasmo por los parisinos.

La función dirigida por Savary es un es un compendio de la historia de la música negra, la esclavitud y las diferencias culturales entre Francia y Estados Unidos. Se pueden ver impresionantes números de claqué, blues, jazz o música africana. La coreografía es magistral y todos los números se hacen amenos. Mención especial merece el narrador, ese músico de jazz que está buscando su piano bajo los restos del Katrina. El actor Miquel Angel Ripeu lo borda, destacando su voz, tan importante en el teatro.

No me puedo olvidar del trasfondo social y político. Hay referencias a la situación actual de la población negra de New Orleans y a la política segregacionista que sufrió la población de color en EE.UU hasta 1956. Tanto a través el narrador como de las imágenes que se muestran en el decorado hay pinceladas sobre el Ku Klux Klan, Martin Luther King y las ruinas que provocó el Katrina.

Y qué decir de la música. En la representación suena ese jazz de New Orleans que levanta hasta al más frío de los seres humanos. Vitalista, contagiosa y deliciosamente interpretada esta comedia termina con una emotiva declaración de amor a una ciudad: New Orleans forever!

5 comentarios:

Olvido A. dijo...

No sabes la envidia que me das. Hace un año, me quedé con una entrada comprada... No pude llegar a tiempo al teatro.

Te seguiré (moi aussi) la pista.

Jim Garry dijo...

Bienvenida Olvido, la verdad es que como he escrito salí impresionado con esta obra. Si tienes oportunidad, intenta verla porque la vas a disfrutar.


Saludos.

Anónimo dijo...

Una gran obra, absolutamente recomendable. Yo fui sin saber nada en especial sobre ella, tan solo que era un viaje a través de la música negra, y la verdad que no pude hacer mejor elección. A mi también me gustó mucho M.A.Ripeu aunque todos los actores se merecen ser destacados porque hacen un trabajo espectacular.

Jim Garry dijo...

Grace, yo tb fui sin tener referencias, tan sólo el argumento y la función sobrepaso mis expectativas. Y tienes razón todos hacen un trabajo espectacular.

Besos

Caminante 2.10 dijo...

A mi me paso como Olvido, primer sabado de la Aste Nagusia y me quede sin poder ir por una ciatica.

Osea un putadon!

Cosas que pasan.

Reparito 2.07

Pd. Te apunto y te sigo...