sábado, 7 de diciembre de 2024

Tom Waits 75

Setenta y cinco tacos cumple hoy Tom Waits. Me imagino al de Pomona correteando junto a sus nietos en su rancho. Jugando a ser pequeño cuando siempre quiso ser mayor. Contándoles truculentas historias y otras llenas de esperanza e ilusión. De vez en cuando será interrumpido por algún asesor que le dirá que le ofrecen una pasta gansa si cede una de sus canciones a tal o cual spot publicitario. Y nunca vas a escuchar a nadie decir que no más rápido. Ja. Es evidente que Tom Waits es ya un músico retirado. Se ha ganado una reputación fabulosa entre sus compañeros de profesión y comercialmente ha terminado haciéndose un hueco muy grande. Aunque parezca mentira se han vendido millones de ejemplares de sus discos. Es algo muy loco. 

En mi casa se hizo un hueco eterno. Su música me ha acompañado en todos los momentos de mi vida y es del músico que más discos me ha regalado Su. Cuando estaba terminando mis estudios sonaba a todas horas Mule Variations... La primera vez que vi un disco suyo original en casa ajena fue en la de mi primo Oscar que tenía Swordfishtrombones en cassette. Ahí es nada. Posiblemente una de las revelaciones musicales más atómicas que he tenido en mi vida fue cuando me puse a fondo con Rain Dogs... Muchos años después le cogí el gusto también a su primera época, esa en la que parecía un vagabundo que frecuentaba tugurios llenos de humo y de jazz. The Heart Of Saturday Night es mi favorito  pero adoro todos. Es necesario señalar lo importante que fueron en su carrera tanto Bones Howe como Kathleen Brennan. El primero un gentleman que le produjo maravillosamente sus primeros discos, la segunda, la persona que le empujo a llevar su música más allá.

Todo lo que tenga que ver con Waits me interesa. Su faceta interpretativa esta sazonada de momentos sublimes, irresistibles, dejando su impronta de forma aplastante en El Rey Pescador, Drácula, Vidas Cruzadas o La Balada de Scruggs... En este cochambroso blog me lo suelo pasar muy bien juntando letras y dos de los post que recuerdo con más cariño son la reseña que escribí sobre la biografía que realizó Barney Hoskyns y otro que titule Tom Waits y Nueva York. Tuve la inmensa fortuna de ver con un gran amigo a Tom Waits en directo en el Kursaal de Donosti en 2008. De esas veladas que no olvidas... Resumiendo otro al que le debo pasta. 





2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Conservo esa cassette!
Y otros 20 cds del Tio Waits.
Siempre a nuestro lado. Como se hecha de menos tipos tan singulares en el mundillo musical.
Todo lo que nos ha dado es impagable.
Óscar

J Aybar dijo...

Amen .. yo me bauticé en la época de Big Time y tampoco paré nunca más. Nunca agradeceré bastante esa gira que mencionas y la oportunidad de verle en directo. Un momento que estará para siempre en mi cabeza.