Tal vez sin haber cumplido todavía los sesenta tacos se antoja muy pronto para escribir unas memorias, o quizás no, seguro que ambos tendrán jugosas historias que contar y como confío plenamente en sus habilidades para ello espero con ansia hacerme con ambos. Almost Grown se publicará en abril del próximo año. Ya está en preventa. La carrera de Jesse Malin comenzó cuando era un adolescente hiperactivo de Queens que encontró en el rock´n roll una pasión a la que dedicarse en cuerpo y alma. Despuntó siendo un imberbe con Heart Attack y se hizo grande en los círculos undeground de NYC con D Generation, seminal combo de punk rock. Desde que comenzó su carrera en solitario hace más de veinte años su discografía es esencial en mi hogar. Adoro su trayectoria en solitario. Y la máxima de la misma la define Jesse Malin de esta forma: Me gustan las buenas canciones, y los grupos que tocan baladas tranquilas y cosas fuertes en el mismo disco. Añado, y que surcan diferentes estilos musicales sin complejos, en perfecta y extraña armonía como sus adorados The Clash.
Desconozco si hay algún plan para que el libro se edite en castellano. Lo dudo. Si no es así haré ese esfuerzo extra y lo leeré en inglés. Faltan todavía unos cuantos meses para que se edite y es probable que venga acompañado de un disco nuevo, mientras, es un placer recurrir por enésima vez a rodajas tan bellas y especiales como Sad And Beautiful World, Sunsent Kids, New York Before The War, Love It To Life, Glitter in the Gutter o The Fine Art Of Self Destruction... Toda la suerte del mundo a Jesse en en su proceso de recuperación.