Los deberes

El pasado 2 de junio a eso de las nueve de la noche mientras preparaba la cena comenzó en Hora 25 de la Cadena Ser, un interesante debate sobre los deberes que mandan a los niños en el colegio. Unax y Maialen estaban jugando por la casa en su línea habitual pero Unax que tiene el oído muy fino en un momento dado se acercó a toda leche y me dijo, eh aita que están diciendo ahí de que un aita le hace los deberes a su hija... Entonces apagué la radio. Por un lado no tenía las fuerzas suficientes para rebatir los argumentos del padre en cuestión y por otro no estaba siguiendo en las condiciones adecuadas un debate que me interesaba mucho.

Como al día siguiente no tenía que trabajar me fui por la mañana a hacer deporte armado con mi imprescindible mp4 y me llevé el podcast correspondiente al debate que tanto me interesaba. Invitaron a una madre de tres hijos, uno de los cuales con apenas 12 años tenía tal cantidad de deberes y les tenía que dedicar tanto tiempo diario que acabó por estresarse. Yo alucinaba con el testimonio. Entre dos y tres horas diarias para hacer deberes tras haber estado en el colegio casi siete horas. No le veía y sigo sin verle sentido.

En el debate se indicaron algunas cifras interesantes y participaron tanto profesionales del sector como padres, psicólogos y sociólogos. Los testimonios con los que mas coincidí fueron los de los padres preocupados por el escaso tiempo libre que les queda a los niños tras estar toda la jornada en el colegio y tener que hacer deberes que según muchos expertos en educación están mal planteados y no está demostrado que sean eficientes sino todo lo contrario.

Entre los participantes en el debate el caso más llamativo es el de un padre de Murcia, a la vez profesor que ante la avalancha de tareas que le mandan a su hija en el colegio ha tomado la decisión de sentarse con ella hacer los deberes y una vez comprobado que sabe hacer el deber en cuestión, como la mayoría se basa en la repetición le hace una parte de ellos. La niña va bien en el colegio y y el día le da para tocar la guitarra y realizar otras actividades, además de tener tiempo para jugar que parece que se nos olvida que esa es una parte fundamental en el desarrollo de cualquier persona. 

La educación es uno de los pilares básicos de cualquier sociedad y en España es uno de los aspectos en los que menos consenso hay. Cada partido que llega al gobierno suele hacer la reforma educativa correspondiente sin contar con los profesionales del sector y no parece que el tema vaya a cambiar. Mientras volvemos locos a los niñ@s. Y la cuestión de los deberes no escapa a estas consideraciones. Aunque supongo que la situación está lejos de cambiar es interesante que los padres y madres nos involucremos en el tema y seamos activos para participar en un cambio a mejor.

Ayer escuché los deberes que Cesare Cata un profesor italiano les ha puesto a sus alumnos para el verano, una lista que se ha hecho viral, pongo esta palabra porque la acabo de aprender hace poco y queda molona. Seguro que hay personas que piensas que este maestro es un guay pero leyendo sus recomendaciones no veo nada malo en ellas, sino todo lo contrario.

1 A veces, por la mañana, da un paseo por la orilla del mar completamente solo: mira la forma en que la luz del sol se refleja en el agua y piensa en las cosas que más te gustan en la vida; sé feliz.

2 Trata de utilizar algunas de las nuevas palabras que aprendimos juntos este año: mientras más cosas logres decir, más cosas lograrás pensar; y cuantas más cosas piensas, más libre serás.

3 Lee tanto como te sea posible. Pero no porque tienes que hacerlo. Lee porque los veranos inspiran aventuras y sueños, y cuando leas te sentirás como golondrina en vuelo. Lee porque es la mejor forma de rebelión que existe (para consejos sobre qué leer, ven a verme)

4 Evita las cosas, las situaciones y las personas que te hacen sentir negativo o vacío: busca situaciones estimulantes y la compañía de los amigos que te enriquecen, que te atienden y aprecien por lo que eres.

5 Si te sientes triste o con miedo, no te preocupes: el verano, como cada cosa maravillosa en la vida, puede arrojar el alma a la confusión. Trata de mantener un diario para contar cómo te sientes ( en septiembre, si lo deseas, lo leeremos juntos).

6 Baila, sin sentir vergüenza por ello. En una pista de baila cerca de tu casa, o solo en tu habitación. El verano es una danza, y es absurdo no participar en ella.

7 Al menos una vez, mira el amanecer. Permanece en silencio y respira. Cierra los ojos, siéntete agradecido.

8 Juega un montón de deportes.

9 Si conoces a alguien encantador, díselo a él o ella, con tanta sinceridad y gracia como puedas. No importa si ella o él no lo entienden. Si no, él o ella no estaba destinado a ser (tu pareja): de lo contrario, el verano 2015 será un tiempo dorado juntos ( si esto no funciona, volver al punto número 8)

10 Revisa tus notas de nuestra clase: compara las cosas que leímos y aprendimos con las cosas que te suceden.

11 Sé tan feliz como la luz del sol, tan indomable como el mar.

12 No digas malas palabras. Sé siempre bien educado y amable

13 Mira películas con diálogo desgarrador (en inglés si es posible), con el fin de de mejorar tus conocimientos del idioma y tu capacidad de soñar. No dejes que termine la película con los créditos finales: revívela mientras estés viviendo y experimentado el verano.

14 Bajo la luz brillante del sol o en las noches de verano, sueña cómo podría y debería ser tu vida. Durante el verano, siempre haz todo lo posible para no darte por vencido, y todo lo que puedas para lograr tus sueños.

15 Sé bueno.