domingo, 17 de noviembre de 2013

Fun Lovin´ Criminals. 100% Colombian

Tal día como hoy hace quince años se editó 100% Colombian de Fun Lovin´ Criminals. El trío neoyorquino había debutado tres años antes con Come Find Yourself en el que se movían con mucha clase por diferentes géneros musicales. Su irrupción en la escena de los noventa fue divertida y fresca a más no poder en una época en la que demasiadas cosas tenían una carga trascendental un poco agobiante. 100% Colombian les trajo de vuelta más inspirados si cabe, más souleros y sobre todo con una imponente colección de canciones ideales para reinar de noche. Nocturnidad y alevosía desde la portada.

Este álbum entraba primero por los ojos. La esencia de lo cool. Una de mis portadas favoritas de todos los tiempos. Tres tipos rindiendo tributo a la iconografía gansteril. Parecen pillados en un garito con mucha clase. Relajados, amigables, dando rienda suelta a su humor y transmitiendo buenas vibraciones. La imagen no es lo que más me importa en el mundo de la música ni de lejos pero es que estos tipos lo tienen todo. Es esta banda la parafernalia visual y escénica es un elemento que suma, les otorga un plus.

Pero no conviene sucumbir al fogonazo de los flashes. Después de todo lo más importante sigue siendo el envoltorio musical. Y aquí es de lujo. Para abrir oído tenemos un comienzo repleto de sensualidad. Tres canciones nocturnas a más no poder. Up on the Hill, Love Unlimited y The View Belongs to everyone. Ya no les pertenecen a estos sujetos. Se han incrustado en la noche. En Up on the Hill el solo de saxo corre a cargo de un tal Stuart Matthewman al que felicito desde aquí. En esta vida hay que agarrarse a declaraciones tan sencillas y certeras como la que contiene Love Unlimited, aquello de Barry white, saved my life and if Barry White, saved your life, or got you back with your ex-wife, sing Barry white, Barry White, it´s alright.




El tono sensual y relajado está presente de forma sublime en muchas de las canciones del disco. Me encanta perderme en esos temas y escucharlos con detenimiento porque están cargados de jugosos detalles. Temas delicados provistos de un gusto exquisito como The view Belongs to everyone o la incréible We are all very worried about you donde circulan perfectamente integrados pasajes con piano, trompeta y la guitarra acústica. En muchos de ellos más que cantar Huey susurra porque la tesitura lo requiere. Es un ejercicio de estilo, singular e inequívoco que da a cada tema en cuestión un toque especial.

El álbum es variado pero sin despistar. Coherente y avanzando con elegancia. Cada surco tiene su razón de ser. Cada canción está colocada perfectamente. Tras el trío inicial se cuela Korean Bodega con un riff machacón a lo Bo Diddley. Un single perfecto. La típica canción ideal para abrir los conciertos. Contagiosa y pegajosa. Una de este tipo al menos tiene que haber en cada disco de estos tipos.

Back on The Block es una canción que recomendaría a cualquiera para iniciarse en la música de estos sujetos. Provista de uno de los inicios más cool de la historia es un tema que no me canso de escuchar jamás. Podríamos denominarla medio tiempo porque no es ni de las más rockeras ni de las más tranquilas pero eso sería demasiado vulgar para esta banda. Lo dejo simplemente en una canción deliciosa.

10th Street al igual que Korean Bodega es otro potencial single, marchoso y acelerado que nos lleva por esa calle neoyorkina acompañados de coches que aceleran y sirenas que nos advierten de dónde estamos. Irresistible y contagiosa a más no poder. Otra de esas que siempre espero en los conciertos de este trío. La sensualidad vuelve con Sugar que en mis primeras escuchas fue de mis favoritas pero que con el tiempo sucumbe ante el trío inicial. En cualquier caso otra buena canción.

Southside tiene un riff muy sencillo y machacón pero es vacilona a más no poder. Me encanta la letra, sobre todo el estribillo y ese Delancy on my mind, on my mind final… Es un tema poderoso que podríamos incluir en el saco de hard rock pero es que en manos de estos tíos se transforma en otra cosa. Tras la delicada e imbatible We are all very worried about you viene una tacada de temas ideales para la fiesta: All for self, All my time is gone y Big night out con aquella letra tan cachonda. All my time is gone es al igual que Back on the block otro de esos temas con múltiples sonidos que gana con las escuchas y que cuenta con un glorioso comienzo impulsado por la brillante guitarra de Huey y la trompeta de Fast. Para cerrar el bar después de una noche triunfal nada mejor que esa antológica Mini Bar Blues donde estos canallas consiguieron que BB King metiese su inconfundible guitarra.

100% Colombian fue grabado entre los meses de enero y marzo de 1998 en los estudios Sear Sound y Magic Shop de Nueva York y está producido por la propia banda. El ingeniero de sonido fue Tim Latham y su trabajo es esencial para tejer con éxito la propuesta sonora de Huey, Fast y Steve. Tanto es así que Huey siempre le señala como el cuarto componente del grupo. Así que va por él y por todos los participantes en este álbum, que suene de nuevo otra noche más 100% Colombian.