domingo, 22 de junio de 2008

Kobetasonik. 21-06-08





Desde el viernes en las en las campas de Kobeta reinó el negro. Heavy metal. Ayer había un cartel bastante ecléctico donde cabía desde el metal más extremo y en mi opinión infumable de Brujería, el hard rock clásico de Michael Schenker y Tesla y el espectáculo más grande sobre la faz de la tierra (o eso dicen ellos de Kiss). Allí nos dirigimos Iñigo, Ander, Diego, Grushecky el menda.

Nos presentamos en las campas de Kobeta sobre las 18 horas de la tarde. Justo antes ha llovido un poco y el cielo está más negro que la ropa de Halford. Pero afortunadamente la lluvia viene bien, refresca el ambiente y nos sumergimos en el festival. En mi caso expectante y deseoso de ver sobre todo a Tesla y a Kiss. También me atrae el Michael Schenker Group y tengo curiosidad por ver como suena Dio.

Pero los primeros en el cartel que vemos son Brujería. Y maldita la puta hora. Porque ni sentado en la campa te puedes escapar de ese sonido guarrete y aturullado de este grupo que no me hace ni puta gracia. Menudos brasas!. Quedará muy guay decir que molan estos tíos, que si narco metal, que si Marijuana. Olvidado.

El siguiente plato si que es de mi gusto. De hecho creo que Tesla están en un momento impresionante. Y lo que veo y escucho en Kobeta no sólo lo confirma sino que supera mis expectativas. No controlo mucho la discografía de la banda de Sacramento. De hecho sólo tengo los dos volúmenes de Real to reel (los mejores discos del año pasado), el Five man acoustical jam y The Great Radio Controversy. Pero lo que ofrecen en Kobeta ayer es espectacular. Las guitarras brillan, tanto las acústicas como las eléctricas y Jeff Keith canta de vicio. Apenas una hora. Ni que decir tiene que me quedo con las ganas. Espero saciarlas pronto con el dvd Comin' Atcha Live! 2008 que editan el próximo 15 de julio. Imprescindible. Y afortunados en Zaragoza que les tienen hoy.

Nos lo tomamos con calma y cuando cambiamos al otro escenario ya ha empezado el show de Michael Schenker Group. Suena bien pero tampoco estamos muy metidos en el ajo. Lo mejor cuando atacan Doctor, Doctor y Rock Bottom de UFO. Después viene Europe y pasamos de ellos. Dio es un veterano que sabe lo que se hace y todo su concierto está repleto de temas del Holy Diver y también cae alguno de Rainbow. El tío tiene una gran voz pero no es mi rollo. Respeto ese tipo de metal pero no conecto. Cuestión de gustos.

No cabe duda de que el plato fuerte son Kiss. Según Gene Simmons hay que ofrecer un show visual potente para acompañar a la música. Y llegó a esa conclusión cuando en su día vio a los Stones, The Beatles o Cream y le decepcionaron. Bueno esto sería discutible pero está claro que el camino que toman los show de Kiss. Parafernalia escénica impresionante, juego de luces avasallador, pirotecnia. Desde luego el aspecto visual no puede estar más cuidado.
Y con todo el envoltorio preparado atacan con Deuce, siguen con otro par de clásicos y nos encasquetan un solo de batería y de guitarra seguiditos que se comen 25 minutos de concierto. Paul Stanley toma las riendas del show y entre canción y canción se suelta unas parrafadas considerables. Eso hace que pierda el ritmo. Cuando tocan Rock-n-Roll All Night apenas llevan una hora y cuarto sobre el escenario. Y pienso que como esto se acabe aquí me cago en la puta que los parió. Pero afortunadamente salen de nuevo y ofrecen una recta final impecable con Love Gun, Detroit rock city o Lick it up. Parace que se han reservado para terminar a lo grande y por eso te dejan mejor sabor de boca. En fin un buen concierto pero algo extraño, tal vez nos quedamos todos con las ganas.