viernes, 29 de mayo de 2015

Mike Ness. Woodstock 1999

Enredar por Youtube te puede hacer perder innumerables horas de tu tiempo pero a cambio te descubre joyas que desconocías por completo y que captan tu atención como las guillotinas caían sobre los cuellos de los aristócratas franceses en la Revolución Francesa. Toma esa. El avezado lector de este maldito blog ya sabrá de mi desmedida pasión por Cheating at Solitaire de Mike Ness, un álbum sobre el que he escrito un par de entradas. Y esta es otra excusa más para nombrarlo de nuevo y de paso autocitarme con los links correspondientes. Lo que se dice un ego desmedido. Uno que es muy cansino. 

En las campas de Woodstock apareció un 25 de julio de 1999 un como siempre chulisimo Mike Ness saludando a la chusma con su superioridad habitual. No faltan sus comentarios irónicos y puñeteros entre tema y tema y su careto de perdonavidas. Pero ay amigos aquí lo importante es la música. Ness se presenta muy bien acompañado de Brent Harding (bajo), Sean Greaves (guitarra) Chris Lawrence (steel guitar) y Charlie Quintana (batería). Suenan acompasados y poderosos. Si ya le hubiesen acompañado Mando Dorame y Daniel Glass y Springsteen le hubiera hecho las voces de Misery Loves Company (como en el disco) el asunto sería para perder la cabeza. Pero poco le falta.

La ristra de temas que se casca la banda no tiene desperdicio. Caen unos cuantos de Cheating at Solitaire, más las inevitables referencias a Johnny Cash (Ring Of Fire) y a los propios Social Distortion (Ball And Chain). Me lo he pasado pipa viendo tamaño documento y me hubiese gustado tener una jodida maquina del tiempo para plantar mi endeble cuerpo en aquel festival durante aquellos cuarenta y cinco minutos porque Ness ya sabemos que es de los que prefieren la brevedad. 

 

jueves, 21 de mayo de 2015

Michael Monroe. Sensory Overdrive

Un paréntesis en el universo stoniano para escribir sobre Michael Monroe. Estos días el músico finlandés esta terminando las mezclas de su nuevo disco que se publicará en otoño de este año. Será la continuación de los estupendos Horn and Halos (2013) y Sensory Overdrive (2011). Ambos discos ponen el listón muy arriba y mis expectativas son muy altas. Esperemos que el nuevo álbum siga la línea inspirada de los mencionados. Parece que la banda que lo está grabando es la misma de Horn and Halos con la excepción de Rich Jones en lugar de Dregen.

Hasta que se publique podemos recurrir cualquier día a Horn and Halos o Sensory Overdrive. Ambos son dos discos directos y sin edulcorantes que poseen el inconfundible sello de Michael Monroe y que se benefician de mucho talento en la tarea compositiva. En 2011 Sensory Overdrive fue saludado con brío por la parroquia rockera ganando el premio al mejor álbum de aquel año en muchas revistas y supuso un aldabonazo a esta nueva banda de Monroe tras finiquitar su historia con Hanoi Rocks

Sensory Overdrive empieza fuerte con Trick Of The Wrist, un single perfecto con solo de saxo incluido cortesía del propio Michael. La siguiente canción, ´78 no le va a la zaga. Es otro pelotazo que al igual que la primera sigue teniendo su hueco en los conciertos de esta banda. Got Blood? también pega fuerte y en directo puede tener su punto pero es de las que menos me gusta del disco a pesar de la brillante interpretación de Michael Monroe. 



Superpowered Superfly fue toda una sorpresa cuando la escuche y esa sensación se mantiene años después. Es un tema compuesto por Ginger con inequívoco regusto pop, sobre todo en el estribillo y aunque al principio me descoloco con el tiempo me parece un estupendo tema repleto de buenas vibraciones. En esa onda también está All you need, otra de mis favoritas y Gone Baby Gone que cuenta con la jugosa participación de Lucinda Williams que le da el toque definitivo a la canción.

Otra colaboración que llama la atención es la de Lemmy en Debaucherry as fine art y el resultado no decepciona. Es un tema compuesto a medias por Lemmy y Monroe y tiene las señas de identidad de ambos grabadas a fuego. Como sucede con Horn and Halos apenas hay grietas en Sensory Overdrive un disco luminoso perfecto para combatir estos días de lluvia.





domingo, 17 de mayo de 2015

Steve Earle & Lucinda Williams. You're Still Standin' There

La primera vez que escuché a Lucinda Williams fue en este dueto atómico que se marca con Steve Earle para poner fin al álbum I feel alright. Y fue un flechazo. Lucinda tiene una voz fantástica y una forma de cantar muy emotiva y personal, muy alejada del timbre de muchas de sus contemporáneas. You´re Still Stadin´There lo tiene todo. Una de esas canciones que no te cansas de escuchar jamás y una nueva excusa para poner en el mapa I feel alright un disco que llevo escuchando casi veinte años y que sigue sonando igual de poderoso que cuando lo conocí.




I've spent my life following things I cannot see
And just when I catch up to them, they slip away from me
I've been down a thousand trails I've never walked before
I found out that without fail, they lead me to your door

And the world keep turning round and round
It leaves me hanging in the air
My heart keeps turning upside down
And you're still standin' there

Lately I see all the signs, I feel it in the wind
The same thing happens every time that you come back again
I admit that there are nights when I sit up and cry
But sometimes I turn out the lights and pray you'll pass me by

Since you're gone my empty arms have nothing left to hold
And your memory cannot keep me warm but it never leaves me cold

sábado, 2 de mayo de 2015

The Rolling Stones. It´s only Rock´n Roll

La salida de Mick Taylor de los Stones a finales de 1974 no cogió por sorpresa a Mick y Keith. Durante la grabación del último disco en que participó  Taylor, It´s only rock´n roll, Richards puteo bastante al guitarrista criado en el blues y parecía estar allanando el terreno para la entrada en la banda de Ron Wood. La renuncia de Mick Taylor no le privó del despreció de los capos Jagger y Richards. Nadie  podía osar a dejar a los Stones ni en aquella, ni en ninguna época. Wyman también se llevó su ración de varapalos veinte años después. La contribución de Mick Taylor en la carrera stoniana es mucho más que apreciable. Con él grabaron sus mejores discos.

Editado en 1974, It´s only rock´n roll es otro buen disco de los Stones, no tan brillante como el cuarteto invencible: Beggars Banquet, Let It Bleed, Sticky Fingers y Exile On Main Street pero con unas cuantas tonadas dignas de figurar entre lo mejor de estos chicos. A mi me gusta especialmente ese toque negroide y soulero que acentuarían todavía más en Black And Blue. Como muestra una trotera versión de Ain´t too proud to beg, original del imbatible equipo compositivo Norman Whitfield & Eddie Holland.

Antes de Ain´t too proud to beg, los Stones abren con If you can´t rock me una de esas canciones que Mick y Keith podrían componer con solo mirarse nada más entrar al local de ensayo. La típica pieza stoniana con su toque urgente y su desarrollo guarrete. En esa onda efectiva está el corte tres que da título al disco. En mi opinión un tema un poco lastrado por su excesiva duración para lo que propone. Le sobra minutaje. 



Lo mejor viene después. En los tres siguientes temas destaca la presencia del gran Nicky Hopkins al piano, un tipo al que reivindicar una y otra vez. Su toque siempre era perfecto. Till the next goodbye se abre con una deliciosa guitarra acústica y ahí entra Mick cantando de forma sublime. El piano de Nicky ronda con elegancia y para el estribillo se suma la peculiar e imprescindible voz de Keith. No me canso de escucharla. Una y otra vez. Y esconde múltiples matices.

Time waits for no one tiene una arranque que me volvió loco desde que me compré este disco en serie media allá por los noventa en pleno viaje stoniano. Es una de esas canciones diferentes. Tal vez sea por su toque psicodélico, quizá por su desarrollo in crescendo, por los peculiares coros de Richards... Una canción en mi top ten stoniano. Luxury es una canción vacilona, muy sencilla y machacona que tuvo criticas nefastas pero que tiene su punto. A mi siempre me gustó. 



En la onda soul tanto If You really want to be my friend como Fingerprint File son dos canciones como muy buen feeling, no tan redondas como Till the next goodbye y Time waits for no one. En la primera el falsete de Jagger se luce en varias ocasiones y la segunda es un tema inclasificable que al principio no me engancho nada de nada pero que hoy en día escucho muy a gusto. En ambas vuelve a ser fundamental la contribución al piano de Nicky Hopkins