En la época grunge además de gozar con los discos de multitud de bandas que tuvieron en Seatle su centro de operaciones nos beneficiamos de la colaboración entre músicos que cuando se juntaban eran capaces de grabar artefactos tan poderosos como Above, el único álbum de Mad Season. La banda la componían Layne Staley (Alice In Chains), Mike McReady (Pearl Jam y Temple Of The Dog), Barret Martin (Screaming Trees) y Jon Baker Saunders (The Walkabouts). En mi casa este álbum juega en la misma liga que Sweet Oblivion, Dust, Badmotorfinger, Superunknown, Vs, No Code, Dirt... Es decir en lo más alto. No hay duda.
Producido por la propia banda y Brett Eliason el disco tiene una inusitada conexión blues en algunos temas, toques hasta jazzys en otros y una instrumentación espartana, dura como una roca y que se te clava con inusitada fuerza. Imposible no destacar el trabajo de McReady a las seis cuerdas. El amigo Mike puede presumir de ser el principal hacha en dos discos colosales como son Above y el de Temple of The Dog. Y sus compañeros de viaje son a cual más talentoso. Staley tenía una voz personal y única, un arma de destrucción masiva, a veces duele escucharle pero no puedes dejar de hacerlo. Jon Baker Saunders es el menos conocido del cuarteto pero su entendimiento con el batería Barret Martin es de los que dejan huella y tiene el honor de que su bajo abra esta sabrosa rodaja.
El hipnótico y sugerente inicio de Wake Up se me clavó como un aguijón en cuanto mi colega Rober me paso la cinta en la que me lo grabó. Recuerdo ponerlo varias veces seguidas en bucle y volar alto con cada escucha. Uno de los puntos álgidos en la trayectoria de Staley. Pero es que lo mismo es aplicable a todos los temas de este disco. Es más hasta el orden de las canciones es exquisito. No se me ocurre un cierre mejor y más sugerente que All Alone.
El hipnótico y sugerente inicio de Wake Up se me clavó como un aguijón en cuanto mi colega Rober me paso la cinta en la que me lo grabó. Recuerdo ponerlo varias veces seguidas en bucle y volar alto con cada escucha. Uno de los puntos álgidos en la trayectoria de Staley. Pero es que lo mismo es aplicable a todos los temas de este disco. Es más hasta el orden de las canciones es exquisito. No se me ocurre un cierre mejor y más sugerente que All Alone.
Entre medias nos hallamos ante ocho temas más a los que sigue siendo un placer hincarles el oído. Todo el material fue compuesto en apenas una semana y luego Staley le añadió las letras. No hace falta tirarse ni meses ni años para dar con algo bello y perecedero. A ver quién se puede resistir a River Of Deceit y I don´t Know Anything elegidas como singles. Aunque sinceramente hubiesen podido ser cualquiera de las otras ocho porque el nivel es igual de bueno. En el caso de estas siempre me encantó ese sencillo y emotivo inicio en River Of Deceit. McReady da con la tecla adecuada y prepara un comienzo elegante para que la voz de Staley rompa todo por los aires: My pain is self- chosen....
Artificial Red es un blues poderoso, pesado del que no te puedes librar... La letra es estremecedora, aspecto común a todo el disco. Y es que el amigo Staley no era precisamente un tipo estable. Multitud de demonios, innumerables problemas con las drogas, angustia vital extrema.... Nada para salir de fiesta vamos. En las antípodas de Van Halen. Pero uno no puede evitar en ocasiones regodearse en todo este material aunque su exposición continúa no es recomendable. No escucho a menudo este material pero mentiría si no escribiese que me parece tan bueno como cualquier otra cosa que forme parte de mi dieta habitual.
Las dos apariciones de Lanegan son fulgurantes. Es una gozada escuchar a Staley y Lanegan juntos en I´m Above y la presencia de Mark en Long Gone Day es fundamental. Es la canción más experimental del disco. Cuenta con un curioso y penetrante sólo de saxo cortesía de Skerik y la interpretación de Staley y Lanegan emociona. Si vas a una tienda de discos y no encuentras esta joya es que algo está mal en el puto universo. Y que me aspen si Barret Martin no es un batería colosal, a reivindicar hasta el fin de los días.
Artificial Red es un blues poderoso, pesado del que no te puedes librar... La letra es estremecedora, aspecto común a todo el disco. Y es que el amigo Staley no era precisamente un tipo estable. Multitud de demonios, innumerables problemas con las drogas, angustia vital extrema.... Nada para salir de fiesta vamos. En las antípodas de Van Halen. Pero uno no puede evitar en ocasiones regodearse en todo este material aunque su exposición continúa no es recomendable. No escucho a menudo este material pero mentiría si no escribiese que me parece tan bueno como cualquier otra cosa que forme parte de mi dieta habitual.
Las dos apariciones de Lanegan son fulgurantes. Es una gozada escuchar a Staley y Lanegan juntos en I´m Above y la presencia de Mark en Long Gone Day es fundamental. Es la canción más experimental del disco. Cuenta con un curioso y penetrante sólo de saxo cortesía de Skerik y la interpretación de Staley y Lanegan emociona. Si vas a una tienda de discos y no encuentras esta joya es que algo está mal en el puto universo. Y que me aspen si Barret Martin no es un batería colosal, a reivindicar hasta el fin de los días.