miércoles, 20 de marzo de 2013

The Wire. Cuarta temporada


En los extras de la cuarta temporada de The Wire hay un par de documentales sobre la serie. Son los habituales making off sólo que en esta ocasión tienen verdadero interés. En ellos aparecen los creadores de la serie (David Simon y Ed Burns, además de muchos de los actores que aparecen en pantalla. Todos coinciden en señalar que la serie refleja con realismo cómo son las cosas en Baltimore. Bueno, como se desarrollan en una parte de esa ciudad. Porque si fuese así en todo Baltimore sería desolador. Pero lo que sucede en el lado más sucio de Baltimore es aplicable a cualquier urbe media o grande desindustrializada del primer mundo. Un panorama desolador. La baza del hiperrealismo es jugada con acierto por los creadores de la serie. Pero eso es tan sólo una mínima parte de su éxito.

Ayer terminé de ver la cuarta temporada de la serie. En esta temporada se sigue tirando del hilo y se siguen uniendo todos los casos. Es un proyecto ambicioso pero realizado con sumo cuidado. El eje sobre el que gira está temporada es la educación. La base de todo. Un área fundamental en la sociedad. Y da pena ver cómo funcionan las cosas ahí donde la burocracia aplasta proyectos interesantes o donde se priman las cifras para que un colegio reciba subvenciones por encima de que los alumnos aprendan. Y tal vez muchos desaguisados que suceden después se pueden explicar porque la base (la educación) equivoca los objetivos y los métodos de arriba abajo.

La historia en esta temporada sigue girando en torno a la detención del traficante Marlo Stanfield pero lo hace que no puedas dejar de ver capítulo tras capítulo es la historia de Michael, Namond, Randy y Duke, 4 adolescentes que van a empezar el curso escolar y que a la vez van a tener por una u otra razón relación con las esquinas en las que se vende droga.  Son personas con pocas opciones y que dependen en gran medida de encontrarse con otros seres que crean en ellos y que arriesguen su comodidad y bienestar por ayudar a los demás. Lo cual es difícil de encontrar pero existe. Porque sino este mundo sería mucho peor de lo que es.

Como he indicado en el primer párrafo los creadores y actores de la serie señalan que muchos personajes de la serie están directamente sacados de la realidad. David Simon trabajó doce años escribiendo sobre homicidios en la ciudad, la conoce y la disecciona y se apoya en Ed Burns que fue detective de homicidios. Me gusta pensar que personajes como los de Cedric Daniels, Lester Freamon, Ellis Carver, Howard 'Bunny' Colvin, Pryzbylewski o Dennis Cutty Wise están tomados de la realidad y me encantaría que tipos como Namond tuviesen una segunda oportunidad gracias a gente como el profesor Colvin, lo mismo que Randy con Carver o Dukie con Pryzbylewski. Me quedo con la forma en que acaba la cuarta temporada. Vislumbró esperanza en mitad del caos. Pero no sé que me encontraré en la quinta temporada. Lo que tengo claro es que vistas cuatro temporadas esta serie es lo más grande que se ha hecho en la televisión. A la altura de Los Soprano sin dudarlo.