Terminada la quinta temporada de The Wire entiendo los
elogios que ha recibido. Hay muchos y de toda índole. Ha sido comparada con los
más grandes. Desde Dickens, a Joyce pasando por Tolstoi o Shakespeare por no
mencionar que en la Universidad Harvard, los profesores de sociología la utilizan
para ilustrar sus contenidos. Y sinceramente de los que mencionan sólo he leído
a Dickens y algo de Shakespeare, y si The Wire me parece eso y mejor. Así de
claro. Así que siento no ser muy original pero me uno al club de los que está
absolutamente rendidos ante semejante obra de arte. Y solo se me ocurre
escribir que si alguien lee esto le de una oportunidad a The Wire y que lo haga
en versión original. Ver esto doblado es un pecado.
Finalizado su visionado me pregunto a qué serie le voy
hincar los ojos ahora. Tal vez de vea de nuevo Los Soprano. O quizá lo más
sensato sea intentarlo con Treme, otra ficción creada por David Simon. Este
sujeto se ha ganado que preste atención a todo lo que ha hecho. Quizá The Wire
sea su obra cumbre y jamás logre hilar todo de forma tan increíble como en la
serie sobre Baltimore. The Corner, también de Simon y antecesora de The Wire es
otra opción.
La quinta temporada, no obstante, me ha dejado un regusto
agridulce. Por una parte, me fastidia que termine porque creo que podría dar
para más (aunque, insisto está todo perfectamente hilado) y por otra he
disfrutado como un enano con las historias que se han contado desde Baltimore.
Es como cuando lees una gran novela, de esas que te enganchas y no puedes parar
de leer, que te hacen perder horas de sueño… The Wire juega en esa liga. Me
entretiene a la vez que me hace pensar, casi sin darme cuenta. Todo un logro.
La serie te exige que estés un poco atento y a cambio te ofrece mucho.
La quinta temporada ha tenido como eje los medios de
comunicación. Y como en las anteriores, David Simon no se ha dejado nada en la recámara.
Es más, estoy seguro de que esta es una de las que más ha disfrutado elaborando
porque él mismo fue periodista en el Baltimore Sun. Todo ese mundo le toca muy
de cerca. Y se acabó. Y la echó de menos. Si, es solo una serie, pero vaya
nivel. Ahora me tengo que hacer con el libro The Wire. Toda la verdad porque quiero seguir sabiendo cosas sobre este
monumento a la cultura. Y seguro que
algún día la volveré haber. Porque The Wire habla de la condición humana y
seguirá vigente.
De acuerdo en todo, yo soy fan de la serie como tu, y creo que no ha existido otra mojor, de todas formas la quinta temporada es la que menos me gusto. Te recomiendo Treme, es otra pedazo de seriaca.
ResponderEliminarSaludos.
Yo, de "The Wire" sólo he visto la primera temporada, y me gustó mucho. Algún día acabaré de verla, seguro. Es una serie que está muy bien hecha, y cada personaje es un mundo en sí mismo. Estoy finalizando de ver en estos momentos "a dos metros bajo tierra" (six feet under) y, bueno, si no la has visto, te la recomiendo efusivamente. Una pasada. Cuando la finalice, creo que me animaré por fin a ver el restos de temporadas de tu serie fetiche.
ResponderEliminarUn abrazo
LuisF
Bueno, pues ya lo has hecho, ya has escuchado es "Eric, lets go home". A mí también me dejó un regusto amargo ese final, el narrativo (hay esperanza pero está rodeada de mierda) y el televisivo (¿no hay más?). Particularmente Treme no me dijo nada. Extrañamente porque lo tiene todo para gustarme: música y el equipo de The Wire, pero no logró despertarme el más mínimo interés.
ResponderEliminarBaci e abbracci
Addison de Witt: Coincido en que la quinta temporada es la que menos me ha gustado dentro de un nivel tremendo. Tengo ganas de ver Treme. A priori reúne todos los requisitos: tb es de David Simon, la música, New Orleans, vuelve a salir Steve Earle.... A ver..
ResponderEliminarLuisF: A dos metros bajo tierra es otra de mis favoritas. Lo que ocurre es que en mi opinión no mantiene el nivel en todas las temporadas. La primera y la segunda son impresionantes, la tercera y la cuarta tienen buenos momentos pero flojean y la quinta temporada y el final especialmente me fliparon.
Madame de Chevreuse: Coincido contigo en lo del regusto amargo por los dos motivos que señalas. Tal vez podrían haber hecho alguna temporada más pero la verdad tal y como ha quedado para mi está arriba en el Olimpo junto a Los Soprano.
Sex, love and rock´n soul