Otra mañana entretenida en el laboro. Numerosas novedades discográficas de la más variada índole. El lanzamiento más mediático sin duda el de Bob Dylan. Nuevo disco, triple ni más ni menos. Versiones de temas popularizados por Frank Sinatra. Así con un par. No se conforma el judío de Minnessotta con endosar un disco de ese pelaje, no, mejor tres de una tacada. A ver quién puede más. ¿Le habrán reído esta nueva gracia los dylanitas de este mundo?
Lo hemos puesto y a la media hora mi compañero me ha espetado: Esto es muy duro... En fin cada día admiro más al jodido Dylan. Hace lo que le sale del nardo. Sin duda puede permitírselo. Ya estuvo de risa lo del Nobel pues ahora con este disco continúa su senda cómica... El despiporre total ha sido cuando hemos curioseado el libreto. Ahí aparece Dylan acompañado de una despampanante morena, ambos lucen un ridículo sombrero y miran a la cámara apoyados en un coche que parece tener las ruedas pinchadas. Momento delirante. Esa foto da para mucho.
Uno se espera estas cosas del nuevo disco de Steel Panther que ha compartido fecha de lanzamiento. Y si, en efecto, en el libreto de estos comediantes heavy metaleros las fotos están a la altura de las expectativas. Confieso que no me he atrevido a hacer sonar el álbum en la tienda. He sido un cobarde pero seguro que era más digerible que la profanación del cancionero de Sinatra a cargo del bueno de Dylan. Finalmente he optado por una novedad de un grupo del que no tenía ni una referencia. He buscado algo para ver como lo definían: punk blues ponía, pues venga, allá vamos.... Pero ni me acuerdo del nombre.