Todavía no he perdido la esperanza de que Steve Earle vuelva a grabar algo que me vuele la cabeza. Tras pasar unas vacaciones a la sombra este hombre encadenó una serie de discos imbatibles, los que van del Train a comin a Jerusalem para mi gusto su ultima gran obra. Ahora retorna con un disco y novela basado en Hank Williamas y como siempre me acercaré con ese cosquilleo que me provocan mis favoritos. Y Steve es sin duda uno de ellos. Mientras mi camello hace su trabajo un pequeño recordatorio de lo bueno que es este tipo. I feel alright!!!!!